domingo, 30 de diciembre de 2018

UNA POESÍA DE LA CORRIDA DE LA PRENSA DE 1916

Así mató Rafael a su primero. (Foto: Toros y Toreros)
El 3 de julio de 1916 se celebra en Madrid la tradicional Corrida de la Prensa. Como en años anteriores la comisión contrata toros de dos ganaderías -Duque de Veragua y Eduardo Miura- y anuncia cuatro diestros: Rafael y José Gómez Ortega, Rodolfo Gaona y Juan Belmonte. 

La tarde se la lleva, por número de trofeos, Rafael, que pasea una oreja del primero. José anda lucido con su lote, Rodolfo desdibujado y Juan, desigual. Al día siguiente la revista 'El Toreo' da buena cuenta de cuanto sucedió y describe con esta poesía los prolegómenos del evento.






LA EXTRAORDINARIA

¡Gran corrida extraordinaria
a las cuatro de la tarde;
eso dicen los carteles
de colores nacionales:
matan los Gallos, Gaona
y Belmonte ¡casi nadie!
Todo es júbilo la Villa
famosa del Manzanares;
¡qué movimiento! ¡qué bulla!
¡qué animación en las calles!
¡cuántas mujeres hermosas!
¡cuántos lujosos carruajes!
¿Quién deja de ir a los toros,
si hay entusiasmo tan grande
por Gaona, por Belmonte
y los Gallos... ¡los cuatro ases
de la baraja taurina!;
por los cuatro chicos grandes
que con el traje de luces
hacen lo que no hace nadie?
¡Ea, a la plaza, a la plaza,
que hoy será una buena tarde,
y allí hay sol, luz y colores,
y alegría en los semblantes,
y flores en abundancia
y gente de todas clases
y mantones de Manila
y mujeres como arcángeles!
Calesero, date prisa,
sube de un salto al pescante,
fustiga a las cuatro jacas
y que corran más que el aire.
¡A la plaza, corre, corre,
porque quiero llegar antes
de que salgan las cuadrillas
que hoy mandan,., ¡los cuatro ases!

                                                             Gonzalo Cantó

miércoles, 26 de diciembre de 2018

PRIMERA ALTERNATIVA DEL SEÑOR FERNANDO

Fernando Gómez García tomó su primera alternativa –al volver a las novilladas hubo de tomarla una segunda vez- el domingo 16 de abril de 1876 en Sevilla. Fue en la primera corrida de la feria de abril, que continuó el 18 y acabó el 19.
El padrino de la alternativa fue Manuel Fuentes ‘Bocanegra’ y actuó como testigo José Lara ‘Chicorro’. Los toros pertenecieron a la ganadería de los herederos de Josefa Vázquez, viuda de Martínez, antes de la viuda de Varela, de Medina Sidonia, que acabaron con 14 caballos. La entrada no pasó de regular.
A continuación se ofrece la crónica de la actuación del patriarca de los Gallo publicada en el Boletín de Lotería y de Toros de lunes 24 de abril de 1876.


'Bocanegra'
El pañuelo blanco ondea dando la señal, á la que aparecen las cuadrillas, y previo el saludo de ordenanza, ocupan sus respectivos puestos, esperando la salida del primer toro, que era negro listón, de presencia, cornicorto y bien puesto; desde que pisó la arena demostró sus condiciones de cobarde, haciéndose tardo y con tendencias á la huida.
Julio Fernandez lo pica dos veces. Fuentes otras dos cayendo en una. Antonio Calderón (hijo) lo castiga igual número sin que las cabalgaduras tuvieran percance.
Las cornetas hacen la señal de banderillas, y Manuel Campos y Bienvenida colocan el primero dos buenos pares de frente y el segundo, después de una salida falsa, señala un par que se cayó. Bocanegra cede al Gallito los útiles de matar según costumbre, y este brinda á la presidencia, buscando al toro que se hallaba en las tablas defendiéndose y con deseo de dar un mal rato al diestro, que no poseyendo los conocimientos que se necesitan para esta clase de bichos, se le vio vacilar y sin la decisión que se requiere en estos casos: seis pases con la izquierda, dos con la derecha dan por resultado dos pinchazos á paso de banderillas, dos pases más naturales y cinco con la derecha y tres de pecho anteceden á una media estocada muy baja. Este toro en dos salidas que hizo de las tablas para fuera, en una cortó el terreno á un banderillero, teniendo que taparle la cabeza con el capote y el Gallito en otra le tiró la muleta para salvarse. Este matador vestía traje verde y oro.
'Chicorro'
El sexto era berrendo, botinero, de libras y buenas armaduras; Julio le hirió el morrillo tres veces, cayendo en una y perdiendo el caballo, Fuentes en cuatro varas rodó una vez, y un reserva en cinco midió el suelo dos. Chicorro toma los palos y se encarga de parear, colocando medio par al cuarteo y dos sobresalientes, uno de frente y otro al sesgo.
El Gallito, queriendo dejar su pabellón bien puesto, se encarga de dar fin al último toro; dos pases naturales muy buenos y uno de pecho, que arrancó un nutrido aplauso, porque fué merecedor de ello, preparando al berrendo para que el Gallito le diera un sobresaliente volapié en su verdadero sitio, arrancándose en corto y llegando con la mano al morrillo. El público aplaude con frenesí, y la música acompaña. El toro se hizo tardo al echarse, y el diestro trata de descabellarlo, no consiguiéndolo en dos veces, se echa, y Pulga lo marra; y echándose de nuevo, la puntilla lo concluye al primer golpe.



domingo, 23 de diciembre de 2018

EL SEÑOR FERNANDO DEBUTA DE NOVILLERO EN MADRID

Fernando Gómez, llamado ‘Gallito Chico’ por los cronistas, debutó en Madrid como novillero el domingo 29 de junio de 1873. Se lidiaron dos novillos de Pedro Varela, de Madrid, 1º y 4º, y dos de Francisco Bernar, de Tarifa, 2º y 3º. Su compañero aquel día fue Luis Recatero ‘Regaterillo’.
Tras la lidia y muerte de los cuatro novillos, se soltaron diez novillos embolados. El espectáculo acabó con un castillo de fuegos artificiales del pirotécnico Isidro Hernández. Como curiosidad, asistió el matador Salvador Sánchez ‘Frascuelo’.
A continuación se ofrece la crítica de la actuación de ‘Gallito chico’ publicada en el Boletín de Lotería y de Toros del 30 de junio de 1873.


El segundo toro era de la vacada de D. Francisco Bernar, vecino de Tarifa, y lucia el bicho divisa lila. Era cárdeno lombardo, bien armado, y sin dejar llegar á los piqueros, arrancaba con coraje á la infantería. Cesó algo la lluvia. Julio puso tres vara.s, una delantera, otra buena y en otra el toro le entró por detrá; sacó el caballo herido: Calderón colocó tres puyas y rodó en una, en su auxilio (Gallito) y quedó de infantería, y una vara, cayendo de pié Feijóo, quedando desmontado. Luchano, que así era el nombre del bicho, saltó una vez al callejón de la barrera frente al tendido número 2.

Mariano Antón plantó dos pares, y Ángel Pastor, tras de una salida falsa, un par, todo al cuarteo, y Fernando Gómez (Gallito chico), con solo dos naturales y uno conl a derecha, dió una buena estocada arrancando y contraria.

Regaterillo
El último bicho, de Varela, volvía la cara por Ojinero, y era retinto mohíno, bien armado, y se presentó abanto, pero se creció y se hizo luego tardo por no entrarle bien Chico, que dejó enfriar al loro con una yegua que no se movía cuando estaba cerca del cornúpeto. El señor presidente D. Francisco Gómez Arias estuvo inoportuno en lo que referimos, y debió adoptar las medidas convenientes.

Gallito (chico), hincando una rodilla, esperó al toro y le dio un quiebro cambiando el capote de izquierda á derecha, siendo aplaudido. También dio tres lances á la verónica y una navarra.

 Chico colocó dos varas, una de ellas baja, y cayó; Calderón dos, y perdió el arre, y Feijóo otras dos, viniendo al suelo y saliendo herido el erizo.

José Feijóo, con dos en falso por no entrar el loro, puso dos pares al sesgo, y Nicolás uno cuarteando; y Gallito chico, previos cinco pases naturales y tres con la derecha, desarmado una vez, citó y recibió, dando una en hueso, sin consumar la suerte, otra en hueso arrancando sin soltar el estoque, y una corta, un poquito baja y arrancando, siendo introducida á palos desde la barrera: el puntillero acertó al primer golpe.




miércoles, 19 de diciembre de 2018

MUERTE Y FUNERAL DEL SEÑOR FERNANDO

En la revista La Lidia del 16 de agosto de 1897 apareció la siguiente crónica en torno a la muerte y funeral del señor Fernando.

A las dos de la tarde del día 2 de Agosto, y después de haber recibido los Santos Sacramentos, falleció en la huerta denominada del Algarrobo, término de Gelves, el veterano torero Fernando Gómez (el Gallo).

Amortajado por su tío D. Emilio Alcalá y el picador Pimienta, se le colocó en una de las habitaciones de la casa, sobre una modesta plataforma, á cuyos lados se pusieron cuatro blandones.

Durante la noche velaron el cadáver del célébre diestro sus hermanos políticos, el ya nombrado Pimienta, el viejo torero Joaquín Ortíz, Vidal y Cansino.

El entierro se verificó el día siguiente, á las cinco y media de la tarde, á cuya hora se puso en marcha la comitiva.



Cerrada la caja, fue llevada en hombros hasta la salida del pueblo, por Pimienta y los Sres. Espejo, Cansino y Zambrano.

Colocóse luego el féretro en una lujosa carroza, tirada por cuatro briosos caballos lujosamente empenachados. Al carro mortuorio seguían gran número de coches ocupados por muchos amigos del difunto, entre los que figuraban los señores Pérez de la Concha (D. T.), Vaquero, Torres Navarro, padre del Bombita, Vela, Díaz Hidalgo, Ramos, Benavente, Chaves, Hernández, Gutiérrez, Reyes, González, Cansino y no pocos de los toreros que se encontraban en Sevilla.

Guerrita
El día 4, á las ocho y media de la mañana, se celebraron los funerales en la iglesia parroquial de San Lorenzo, formando el duelo D. Miguel Corona, D. Francisco Mata, D. José Antonio Adalid, D. Luis Ibarra, D. Plácido Zambrano, D. Juan Cansino, D. José Martín, D. Benjamín del Vando, D. Juan Conradi, don Tomás Pérez de la Concha D. Cristóbal Bonilla y D . Francisco Fuentes. 

 Asistieron al fúnebre acto los diestros Fuentes, Bonarillo, Algabeño, Pulga de Triana, Vaquerito, Tenreyro, Blanquito, Primito y otros; los ganaderos, Sres. Halcón, Cámara (representado) y Cámara; muchos aficionados y representantes de la prensa taurina de Sevilla.


Pocas horas antes de morir, y cuando ya notó que se le escapaba la vida, llamó á una de sus hijas, le pidió papel y pluma y trazó con letra apenas inteligible las siguientes líneas: «A mi compadre Guerrita: En la hora de mi muerte le pido que no deje sin pan á mis hijos. Se lo pide moribundo su compadre, GALLITO.»