miércoles, 30 de diciembre de 2020

EL GALLO Y LA TRINCHERA

El actor Enrique Rambal García.
‘El Día’ publicó el 9 de enero de 1928 este curioso artículo firmado por José Alfonso en el que le recrimina a Rafael que vistiese a la moda: 

“La prensa ha traído recientemente una fotografía del homenaje a Rambal en la que aparece al lado del terrorífico actor, Rafael Gómez El Gallo, ataviado con una deslumbrante trinchera. 

El torero cañí, último baluarte que nos quedaba de lo castizo, se ha tirado también a la candente arena de la moda. ¡El Gallo con trinchera, como cualquier pollo jamón! Parece un anacronismo, ¿verdad? Porque yo me explico el que Juan he nombrado al fenómeno de Triana se cortase la coleta en un rato de snobismo y luciese los faldones de ala de cuervo y el tubo flamante en los salones aristocráticos: ya que Belmonte ha querido siempre epatar las glorias de Jorge Bummel fuera de la plaza. Y tenía también que buscar como renovador del torero, la renovación de vestimenta del torero en su vida particular. Pero El Gallo que siempre ha lucido por las calles su camisa de chorreras y su traje corto… no ha desconcertado a todos con sus atavíos de última hornada. Es más, yo no concibo a Rafaé de otra manera que luciendo sus formas gitanas jacarandosas por las calles, con una chatilla de cabos negros, un sombrero de un palmo de ala y el dedo índice puesto en ésta, respondiendo los saludos de la multitud.

- Zalú zeñore.

Paso que Belmonte lea hasta Schopenhauer, pero jamás concebiré al Gallo decorado por una trinchera jamón. A no ser que Rafaé, memorando sus descalabros en las fiestas taurinas, en esas tardes tan presentes en que el pase de trinchera es toda su salvación, lleve la prenda como un recuerdo lleno de gratitud y como un símbolo.”

domingo, 27 de diciembre de 2020

SABLAZO EN NOMBRE DE RAFAEL

Rafael, víctima de un desalmado.
‘La Correspondencia de Valencia’ publicó el 3 de enero de 1928 una noticia en la que, de manera involuntaria, el bueno de Rafael El Gallo aparecía, como protagonista indirecto, en un intento de estafa:

“Sevilla.- Ha sido detenido el banderillero Gabriel Vázquez Huertas, que pidió 200 pesetas a Valentín Rodríguez, en nombre de Rafael ‘El Gallo’, sin que éste tuviera en la demanda la menor participación”.

A continuación, un comentario del que entresacamos los siguientes párrafos:

"La recogemos, además, para hacer resaltar la absurda creencia del banderillero Gabriel Vázquez, que pretendía hacer creer a Valentín Rodríguez que Rafael Gómez tenía la intención de darle un sablazo.
Rafael Gómez, más generalmente conocido por El Gallo, acostumbra, sí, a dar sablazos. Pero son sablazos sin metáfora, sablazos arreados a los toros en justo castigo a la insolencia que representa llevar cuernos que pueden ser dañinos. En cuanto a los otros sablazos, a los sablazos metafóricos, ya es otra cosa. En torno a la personalidad de Rafael Gómez se ha hecho mucha literatura. Ahora bien: gran parte de esta literatura está destinada a pintar la grandísima facilidad con que el torero gitano se deja desangrar los bolsillos por gente de toda laya y condición, y principalmente por individuos de su antiquísima raza”.

miércoles, 23 de diciembre de 2020

JOSELITO EN EL CLUB GALLISTA DE LINARES

Tanto Rafael como José cuidaron a sus partidarios y se mostraron muy cercanos a la infinidad de clubs que se formaron en su honor. Era frecuente verlos en homenajes y participando activamente, como es el caso que nos ocupa, en las capeas o festivales que dichas sociedades organizaban.

Este breve se publicó el 26 de noviembre de 1917 en ‘La Correspondencia de España’:

"El Club Gallista.- Linares, 25.- Anoche, en el expreso de Sevilla, llegó Joselito para dirigir la corrida que para hoy organizó el Club Gallista de Linares. Se lidiaron cuatro novillos de Romualdo Jiménez, que hicieron faena sobresaliente y fueron estoqueados por los socios del club D. Alberto Villaescusa y D. Manuel García. Gallito fue ovacionado al torear con el capote y en un par monumental que puso. El público salió satisfechísimo. 

Esta noche el club obsequia a Joselito”.

domingo, 20 de diciembre de 2020

JOSELITO: CINCO PÁRRAFOS PARA RESUMIR UNA TEMPORADA

Añadir leyenda
Bajo el epígrafe ‘Notas Taurinas’ y en solo cinco párrafos, resumió ‘Diario de Córdoba’ en su edición del 10 de noviembre de 1915, lo que fue para Joselito la temporada que había finalizado:

“Según datos que tenemos a la vista, el famoso espada sevillano José Gómez ‘Gallito’ ha tomado parte durante la  temporada última en el respetable número de 102 corridas, cifra no alcanzada hasta hoy por ningún otro diestro.

Antonio Fuentes y Rafael González ‘Machaquito’ pasaron de este número, pero fue incluyendo las toreadas en América.

En referidas corridas, Gallito ha estoqueado 241 toros. 

El producto líquido obtenido asciende (según cálculos hechos por el notable diestro) a la elevada suma de 90.000 duros.

Es digno de anotarse que Gallito no ha sufrido durante la temporada percance alguno que le interrumpiera su labor”.

Haciendo unos sencillos cálculos, la media por corrida fue de 4.411,76 pesetas o lo que vienen a ser hoy en día 26,51 euros.

miércoles, 16 de diciembre de 2020

JOSELITO REJONEADOR Y UNA FOTO FAMOSA

La plaza de toros de Córdoba anunció para el 7 de noviembre de 1915 un festival a beneficio de los Exploradores de la ciudad. El matador de toros retirado Rafael González ‘Machaquito’ visitó días antes a la Presidenta del Comité de honor para ofrecer incondicionalmente su participación y, si alguno de los novillos reuniese condiciones óptimas, saltar al ruedo a reeditar antiguos éxitos. Los ganaderos que enviaron productos para ser lidiados fueron: Miura, Albarrán, Domecq y Gamero Cívico. Los ejemplares tenían buena lámina.

Tres Rafaeles y Joselito.
Joselito y Posada se brindaron a rejonear y el día 6 arribaron en el tren carreta los caballos que se habían destinado al efecto. En el festejo también iban a tomar parte los aristócratas: Carlos Pikman; Clemente Tassara; Julio O’Weille, Marqués de la Granja; y Antonio Cañero quienes, como sus compañeros rejoneadores, llegaron a Córdoba en el expreso del día 5. Como picadores, Salustiano Rico ‘Sevillano’ y Martín Trujillo ‘Patriarca’.  Como directores de lidia se anunciaron, además de al mencionado ‘Machaquito’, a Rafael ‘El Gallo’ y en la presidencia iba a estar Rafael Guerra ‘Guerrita’. 

Los precios oscilaban entre las 3 pesetas de asientos de cajón y los 50 céntimos para señoras, niños y militares. Todo estaba preparado para que a las 3 en punto comenzara el espectáculo pero la lluvia caída los días anteriores hizo aconsejable el aplazamiento al 14 de mismo mes por el mal estado del ruedo y la humedad que había en los tendidos. 
Por fin, pese a ser jornada electoral, el 14  pudo celebrarse la fiesta con buena asistencia de público. En los asientos preferentes se distinguía un buen número de damas ataviadas con mantón de Manila o la clásica peineta, a las que se les había asegurado que la plaza iba a estar perfectamente limpia para que no se mancharan sus vestidos. A la izquierda del palco presidencial se acomodaron los 160 exploradores cordobeses acompañados de los instructores señores Torres, Fragero, Herrera, Osuna, Lafuente y Solano y de las bandas de tambores y cornetas. 

La Marquesa del Mérito ostentó la presidencia de honor y llegó ataviada con mantilla blanca. La acompañaban las señoritas Cándida Carbonell, Amparo Álvarez de los Corrales, Carmen López de Carrizosa y Emilia Guerra. Las féminas compartieron espacio con Rafael Guerra, Mestre Vera, gobernador civil; Manuel Enríquez Barrios, alcalde; Manuel Tienda Argote, presidente del comité de los exploradores; Manuel Baena Díaz y el Marqués del Mérito. 

El primer ejemplar en saltar al ruedo fue el de Miura,  corrido por de salida Machaquito. Joselito, tras demostrar sus excepcionales condiciones de caballista, prendió un rejón en todo lo alto y el público premió la suerte con grandes aplausos. Francisco Posada clavó otro que no le fue a la zaga. Gallito replicó con dos quiebros y Posada cerró el tercio con otro muy bueno. A pie, se afanaban en la brega, además del anteriormente mencionado Machaquito, Rafael El Gallo y Cantimplas. 
Desmontó José y preparó al bravo novillo para que lo pudiera torear, y matar, el Marqués de la Granja. Anduvo valiente el noble, al que no le quitaron ojo los ocasionales rejoneadores y Rafael González, interviniendo cuando la ocasión lo requería para fijar al novillo. El aristócrata dejó media trasera de buena ejecución, Machaquito quitó el estoque, y repitió el matador con una corta tras varios muletazos. Ovación y regalo de la presidencia.

El segundo era de Albarrán y de escasa presencia. Joselito se dispuso a rejonearlo en solitario al haber resultado herida durante la lidia del primero la jaca que montaba Posada. El menor de los Gómez clavó tres superiorísimos rejones jugando con el animal de modo prodigioso. De todos, sobresalió uno en terrenos de chiqueros, sorteando con gran habilidad la acometida de la fiera. 
La muerte del segundo le correspondió a Clemente Tassara, que lo pasó con valentía arrodillándose al rematar un cambiado superior. Luego lo pasó por arriba sin reparar que el animal tenía la cabeza por las nubes. Atacó con decisión y valentía y recetó media estocada. José sacó el estoque como remate de un recorte. Dos pinchazos más y estocada entrando muy bien. Aplausos y obsequio presidencia.

Al ser arrastrado el novillo saltaron al ruedo Rafael Alvariño y Toreri con un cartel para pedir dinero en favor del banderillero José Béjar ‘Alamares’. Tras el pertinente permiso se sumaron a la causa los novilleros Alvarito, Machaquito II, Bocanegra, Guerrilla y otros compañeros de Alamares. Provistos de capotes, recogieron 380 pesetas y 6 céntimos. Se observó que Guerrita y la Marquesa del Mérito lanzaron un billete de 25 pesetas cada uno. Terminada la cuestación Alamares agradeció desde los medios el beneficio. Días antes se había abierto una suscripción popular y tanto Joselito como Francisco Posada, sabedores del infortunio del subalterno, aportaron 5 duros cada uno.

El tercer cornúpeta era de Domecq y Joselito y Machaco lo corrieron de salida. Antonio Cañero lo pasó de capote con lentitud y Sevillano y Patriarca le administraron cinco puyazos. Quitaron El Gallo, Joselito, Posada y Machaquito. Con los palos intervieron Pickman, Cantimplas, Josepe y el mismo Cañero, que instrumentó una faena de muleta donde prevaleció la tranquilidad y el reposo de pies. Por arriesgar fue prendido y empitonado sin consecuencias. Media, varios intentos de descabello y vuelta al ruedo.

El último, de Gamero Cívico, fue el mayor de todos los lidiados. Carlos Pickman lo saludó con un lance y el animal saltó al callejón produciendo varios sustos. Devuelto al ruedo, volvió Carlos a la carga y al poco fue derribado y pisoteado, saliendo milagrosamente ileso. Sevillano y Patriarca dejaron las varas reglamentarias y el matador, los hermanos Gallo, Machaquito y Posada oyeron aplausos en los quites. Animados, cogieron las banderillas. Machaquito, con el acompañamiento de la música, citó al cambio. Se paró la res en los dos intentos y Rafael optó por prender el par al cuarteo, siendo el resultado muy del gusto de sus paisanos.
Joselito, pleno de facultades y de vista, se libró de una arrancada gazapeando de la res. La llamó de nuevo desde lejos, se dejó ver y, al llegar a la jurisdicción de la fiera, la citó con el pie, aprovechó la embestida y prendió un soberbio par al cuarteo. Francisco Posada dejó otro en la misma suerte y Carlos Pickman se dispuso a pasarlo de muleta entre una tremenda disputa en los tendidos: los unos clamaban porque fuera Machaquito quien acabase con la res mientras el resto abogaba porque lo hiciera Gallito. Pickman, por zanjar el asunto lo más rápidamente posible, estuvo breve y, tras marrar, dejó una estocada superior. 

El peso de las reses, por orden de lidia, fue de: 154 , 126, 145 y 219 kilos. 

De Lis en ‘Diario de Córdoba’, juzgó así la actuación de los Gallos: “Rafael estuvo frío, pues tan solo en dos ocasiones de las varias en que metió el capote le vimos algo de ese arte exquisito del que tiene la exclusiva. (…)
Hasta ahora, Gallito había triunfado siempre como torero, recorriendo todos los circos de España.
Pero no se le conocía como rejoneador y ayer nos demostró que si con el capote y la muleta logra apoderarse de los toros, por marrajos que estos sean, con los rejones es un consumado artista que hace cuanto haya que hacer y que llega a donde llegaran los famosos rejoneadores portugueses. 
Así lo afirmaban ayer antiguos aficionados cordobeses que alcanzaron los tiempos de aquellos.
No cabe más destreza ni más profundos conocimientos de la referida suerte que los demostrados por Joselito. 

El público, que así lo comprendió, no cesó de ovacionarlo”.

La famosa foto  en la que aparecen los Rafaeles cordobeses y los hermanos Gallo y que ilustra esta entrada, fue tomada en la Ciudad de los Califas al día siguiente de este festival en el que José también triunfó como rejoneador.

domingo, 13 de diciembre de 2020

EL SEÑOR FERNANDO EN LA PORTADA DE 'EL TOREO CÓMICO'

La revista 'El Toreo Cómico' dedicó la portada de su número 6, aparecido el 7 de mayo de 1888, a Fernando Gómez 'El Gallo'. 

La caricatura de Redondo muestra al diestro en una de sus típicas estampas presto a dar un cambio de rodillas. Bajo el dibujo, unos ripios:

'Es un torero bonito,
e ingenuamente celebro
con la capa y con el quiebro
al Gallito.
Pero me causa pavura
en lo que viene detrás
si tuviera un palmo más
de estatura'.

Portada de la revista.
(Foto: bibliotecadigital.jcyl.es)



miércoles, 9 de diciembre de 2020

LA ALTERNATIVA DE JOSELITO EN 'THE KON LECHE'

Portada de la revista en cuestión.
(Foto: http://bibliotecadigital.jcyl.es/)
El número 26 de la revista 'The kon Leche', de 29 de septiembre de 1912, dedicó una de sus páginas a relatar la alternativa de Joselito la tarde anterior en Sevilla y las vicisitudes de los días previos:

"La alternativa del menor de los Gallos va resultando el parto de los Montes... Es decir, el parto de los
Gómez.
Entre cogidas, temporales y suspensiones de Gullón, es muy posible que la fecha definitiva del doctorado sea entre Pascua y Reyes. ¡Señores, qué ansiedad!

Alrededor de la suspensión del viernes se ha fantaseado mucho más que ante las probables consecuencias de la huelga ferroviaria.

El tema Joselitó atizado por el peligro belmontista, ha reunido en Madrid a la flor y nata de la afición de los cuatro puntos cardinales.

iQué bullicio en las Cuatro Calles!

¡Qué caras las localidades!

¡Y qué caras las de Mosquera y Retana cuando Gullón suspendió la corrida a las once del día! 

En verdad que nadie se explica satisfactoriamente la causa de la suspensión de la reválida de Gallito. Solucionado el primer contratiempo de la enfermedad de Limeño con la alternativa de Vázquez II, todo hacía sonreír cuando a las cinco de la madrugada del viernes nos retirábamos a descansar, fieles, a nuestras austeras costumbres. 

Un chaparrón inoportuno poco después de salir el sol dio al traste con la fiesta, según parece. 

¡No lo entendemos! El astro rey lució su esplendente cabellera. (¡Vaya estilo!) durante todo el resto del día. ¡Qué lástima! 

El aluvión taurófico que invadía Madrid se dedicó a discurrir por las calles y a discurrir el motivo de la desagradable orden gubernativa. La calle de la Visitación rico venero de caldos andaluces, parecía una romería. 

Perdigón, sentado en un velador de La Sevillana, observaba en silencio. 

—¿Qué haces Perdigón? — Pregunta un forastero. 

—Viendo pasar las máscaras. 

¡La mascarada taúrica del Tío Campanita!

En vista de todo lo cual marchamos á Sevilla... ¡Pero no precipitemos los acontecimientos! 

(POR CORREO)
Sevilla 28.

Los hermanos Gómez Ortega, en brazos de sus partidarios, pasean triunfalmente el ruedo, mientras las charangas instrumentan el pasodoble «Gallito».

El entusiasmo es delirante.

Los diestros de Gelves han oficiado en fiesta mayor.

Expectación enorme por la mañana. Entrada floja por la tarde. El bolsillo ataja el entusiasmo.

Palmas calurosas saludan la presencia de los niños del Sr. Fernando en las arenas de la Maestranza.

El primer bicho, de Moreno Santamaría, es lanceado por verónicas artísticas y apretadas. (Ovación a
Joselito, que viene bueno.)

Y viene la hora de la cátedra de banderillas, en la que ambos Gallos agotan el repertorio de lo clásico volviendo locos a los circunstantes.

En el momento solemne entrega Rafael los trastos al chiquitín, y se emociona el gallinero.

Empieza Joselito su primera faena de matador con un cambio a muleta plegada, que levanta una tempestad de aplausos.

Otro natural y varios ayudados hacen juntar al toro las pezuñas, lo que aprovecha el neófito para atizar un buen pinchazo.

Cita a recibir en el segundo envite y acaba de una estocada algo caída, vaciando la suerte con un pase de molinete.

La ovación al nuevo doctor se oye en Lora del Río.

Mientras el segundo bicho berrendo en negro corretea la plaza, recoge el niño de Gelves palmas y olivas por su admiradísima labor.

Pazos, como Juan Palomo, se torea y banderillea el bicho, rematándolo de tres pinchazos y una corta de efecto rápido. (Palmas).

Y llega el tercer toro, en el que un tal Rafael el Gallo, gitano por más señas, cambia la onza, eclipsando a sus ascendientes, descendientes y colaterales. ¡Vaya un tío!

Con los pies metidos en un hoyo tira el cañí media docena de lances de tijerilla intercalados con sus navarras correspondientes para mayor amenidad del acto.

Coge en seguida los palos, y en competencia con Joselillo, que también banderillea, mete uno de los más soberanos pares de su vida torera. Devuelve el doctorcillo los avíos al doctorazo, cruzándose entre ambos besos y abrazos, que agradan al consistorio.

Y comienza Rafael una faena estupenda de las suyas cuando desea majar a alguien.

Naturales, de pecho, redondos, de molinete, toda la gama del adorno y la ciencia torea, al mismo tiempo se manifiesta en su mágica muleta, que levanta al respetable del graderío.

Un volapié contrario recetado con agallas es digno remate de la asombrosa faena.

La ovación indescriptible se oye en el pueblo de Gaona. E! populacho pide la oreja.

La lidia del cuarto toro se verifica entre estruendosas ovaciones a Gallo mayor, que no sabe si recoger
sombreros o torear. Y así transcurren los tercios hasta el final, en el que Rafael sigue adornándose con la flámula extraordinariamente. Dos pinchazos y otra ración de preciosas filigranas y una estocada delantera, perdiendo la muleta en el viaje.

Gallo toma el estribo y el bicho cae sin puntilla, con gran regocijo de los aficionados, que siguen rompiéndose las manos por la familia.

El quinto muere a manos de Pazos de una de una delantera. Pasemos de prisa.

El que cierra plaza, manso (aunque no es de doña Celsa), se salva del tuesten por decoro de la fiesta, y acaba sus míseros días de una estocada caída que receta Joselito para echarnos a la calle.

Y sobreviene la apoteosis de que hacemos mérito al comienzo de esta desaliñada reseña.


domingo, 6 de diciembre de 2020

PRESENTACIÓN DE GALLITO Y LIMEÑO EN LISBOA

Campo Pequeno. (Foto: retratosdeportugal.blogspot.com)
La cuadrilla de Niños Sevillanos capitaneada por Gallito y Limeño se presentaron en Lisboa el domingo 23 de agosto de 1908. Ese día la empresa de Campo Pequeno programó doble función. 

La primera fue a la portuguesa y contó con la participación de los caballeros rejoneadores Manuel y José Casimiro y varios banderilleros. En la segunda, nuestros protagonistas lidiaron cuatro toretes acompañados de sus subalternos. Ambos espectáculos despertaron gran expectación entre la afición lisboeta. 

Las escuetas crónicas aparecidas a los pocos días cuentan que los Niños Sevillanos estuvieron colosales en la lidia de astados de Infante y que consiguieron muchos aplausos por su trabajo. La suerte suprema fue simulada. 

miércoles, 2 de diciembre de 2020

UNA DEL SEÑOR FERNANDO EN EL MADRID DE 1.895

El señor Fernando quedó bien.
El 2 de mayo de 1.895 se anunció en Madrid la tercera corrida de abono con astados de Veragua para El Gallo, Mazzantini y Bombita. Llovió, el piso de la plaza no estaba en buen estado y Mazzantini arrastraba una erisipela, hechos que decidieron a la empresa a posponer el espectáculo hasta el domingo 5.

Al día siguiente la revista 'La Lidia' publicó una reseña firmada por Don Cándido de entre la que entresacamos los siguientes párrafos dedicados a juzgar la labor del señor Fernando:

"Rompió plaza Miranda, como todos los demás de su excelencia ultramarina; negro bragado, fino, terciado, de buenas carnes y cortito de armas. Con voluntad primero, y tardeando luego, se arrimó dos veces a Cantares, otras dos a Pimienta y una al Albañil, cayendo una vez por barba, y el último con tan mala fortuna, que hubo de retirársele, según parece, con un puntazo en la pierna y dos costillas rotas. Lo lamentamos muy de veras. El bicho se quedó algo en el tercio segundo, que llevaron Blanquito con un par de sobaquillo, desigual y otro bueno al cuarteo, y Taravilla con otro desigual cuarteando, y otro aprovechando. Y también quedadito pasó a manos del Gallo, que lucía terno morado con oro, el que entre seis pases naturales, tres con la derecha y uno de telón, sufrió dos desarmes, clavó una estocada a volapié, perpendicular y atravesada, y terminó con un descabello. Durante la brega, cayó Blanquito en la cara del toro, sin consecuencias. (…)


4º Cordelero; jabonero, claro, fino, grande, cornalón y bizco del izquierdo. Duro, seco y de empuje, toma siete varas de Pimienta, Inglés, Chato y Cantares, propinando seis porrazos y matando dos caballos. Tomás Recatero y Taravilla lo banderillean sin dificultad con medio al cuarteo, malo, y uno de frente bueno, y medio al cuarteo malo, y otro entero lo mismo, regular, respectivamente; pasando en buenas condiciones al último tercio, en el que el Gallo le tomó con tres naturales, uno con la derecha, dos de pecho y uno en redondo, para un pinchazo bien señalado en hueso; uno natural y otro en redondo, para una estocada a volapié algo contraria, y un descabello al sexto golpe.

(…)

- El Gallo, que tiene en los buenos aficionados la consideración que se debe a los toreros viejos, debió quedar ayer bien satisfecho da la acogida que le hizo la Plaza de Madrid, la más discreta y la más justa de todas las de España. ¿No es verdad, Fernando? En el primer toro, el antiguo diestro toreó con alguna precaución injustificada y con debilidad de brazos, sin que la brega excediese de una acostumbra medianía. Tampoco entró a herir con mucha decisión, pero tuvo la suerte de que el toro ayudase, tragándose bien la estocada. En el cuarto, recordó toreando la antigua escuela, con algunos pases superiores y elegantísimos, particularmente los de pecho, y adornándose en toda la brega. Hiriendo en este toro, muy aceptable, aunque le deslució algo los últimos y repetidos intentos de descabello. En el resto de la lidia, no merece más que elogios por sus largas clásicas, el famoso quiebro de rodillas, tan preciso y ceñido, que el toro se llevó el capote en los cuernos, y en el oportunísimo y monumental quite al Bombita, que cayó casi en los cuernos del tercer toro, evitándole el Gallo una cornada segura. Oyó el diestro continuados y justísimos aplausos, y ahí van también los nuestros". 

domingo, 29 de noviembre de 2020

PÁNICO EN LOS TENDIDOS DE BARCELONA CON EL SEÑOR FERNANDO POR TESTIGO

Félix Robert, testigo de la accidente corrida.
La barcelonesa plaza de El Torín abrió su temporada de 1.895 el 14 de abril. En el cartel, toros de Ripamilán para Gallito, Fuentes y la presentación en ese coso del francés Félix Robert, primer torero francés, alternativado el año anterior en Valencia por el mismo Fernando Gómez.

El periódico 'Heraldo de Baleares' recoge al día siguiente la accidentada tarde con estas palabras firmadas por Garcías:

"Los dos primeros toros dieron juego y los matadores fueron aplaudidos.

El tercer toro saltó al tendido número dos, llegando a la tercera fila de asientos sin tocar la maroma.

Tal escena, produjo un pánico en todos los espectadores, que es indescriptible.

Con motivo de buscar las puertas de salida, hubo muchas personas que recibieron considerables contusiones.

El cabo de la Benemérita Ubaldo Vigueras dio muerte de un solo tiro a la fiera; el balazo atravesó a ésta e hirió gravemente a D. Juan Resans, mozo del arrastre.

El Gallito resultó levemente herido al pasar el cuarto toro, siendo aquél conducido a la enfermería, sustituyéndole Fuentes.

El Gallito, a pesar de la herida recibida, salió al quinto, toreando hasta el resto de la corrida.

El nuevo matador francés, Robert, estuvo toda la tarde muy valiente, pero desconoce el arte de manejar la muleta”.

miércoles, 25 de noviembre de 2020

MÁS DATOS SOBRE LA PRIMERA BECERRADA TOREADA POR JOSELITO

Limeño y Gallito, incipientes toreros.
Seguimos con el espectáculo de la entrada anterior: la becerrada que sirvió de presentación a Joselito, Gallito III por entonces, ante la afición jerezana. 

 El periódico ‘El Guadalete’ insertó el martes 20 de abril, bajo el epígrafe de ‘Fiestas taurinas’, la siguiente nota:

“Las dos fiestas anunciadas para ayer, fueron celebradas en nuestro circo taurino a las horas previamente fijadas en los programas anunciadores. 
La de la mañana tuvo lugar presidida por el Jefe de la guardia municipal, con escaso público y poco lucimiento.
La de la tarde, que presidieron las lindar niñas Carmencita Aladro, Catalina Martínez, Manolita Neupaver, Angelita Jiménez Pérez, Carmencita Andújar, Angelita Aparicio y Anita María Fernández, las cuales lucían mantones de Manila, se verificó también a la hora anunciada y con regular entrada. 
Los Niños Sevillanos trabajaron hasta donde sus escasas fuerzas alcanzaron; son efectivamente unos niños, y es por lo tanto imposible pretender exigirles más de lo que hicieron. 
El cuarto y sexto toro, fueron brindados por los diestros respectivos, a los señores D. Arturo Williams y Marqués de Casa Domecq, quienes obsequiaron a los espadas con dos espléndidos regalos”.

Tras una separación y, por lo que se intuye, redactado por otra persona que omite su nombre, aparece la siguiente apreciación:

“El espectáculo de unos niños de 13 o 14 años trabajando para divertir al público, y exponiendo sus vidas explotados por personas mayores, no puede ser agradable a ninguna persona de sentimientos delicados y humanitarios; así es que creemos que estas empresas deben prohibirse en absoluto, es más, creemos que el caso cae dentro de la Ley de Protección a la Infancia, no explicándonos cómo se permite su funcionamiento”.

miércoles, 18 de noviembre de 2020

JOSELITO EN UN CARTEL DE PROMOCIÓN DE LOS NUEVOS VALORES

La quinta edición del certamen Promesas de Nuestra Tierra ha tenido este 2020 a Joselito como protagonista absoluto de su cartel anunciador. El ciclo de novilladas sin caballos que organiza el matador de toros Manuel Amador y retransmite la televisión autonómica de Castilla-La Mancha ha dedicado su particular homenaje a un diestro que sintió la vocación desde muy joven.

El diseño presenta la figura de un Joselito niño rematando una larga cordobesa en un estudio fotográfico. El capote a la espalda y esa mirada que se pierde en un hipotético toro le dan a la imagen una seriedad impropia de la decena de años que aparenta José. 

En el vértice superior izquierdo se lee: "Joselito 'El Gallo' cien años de gloria", conmemorando el centenario de su desaparición.

domingo, 15 de noviembre de 2020

RAFAEL ORTEGA 'GALLITO' TRIUNFA EN LA MAESTRANZA

Portada del folleteo referido. (Colección: Manuel J. Pons)
De Rafael Ortega Gómez 'Gallito' se publicó en 1939 un cuidado folleto publicitario en el que se recogían encomiable elogios de significados aficionados que se habían fijado en su  acusada personalidad. Además la obra contenía algunas crónicas. 

Una de ellas es la que reproducimos a continuación. Fue publicada, sin firma, en el periódico ABC el 18 de septiembre de 1938 y el cartel lo completaban novillos de Juan Belmonte y Manolete y Manolo Martín Vázquez como compañero de este Gallito que tantas ilusiones despertó:

EL BOTE DE TITO RAFAEL


En el Arenal de Sevilla ha aparecido un torero. Lo es de raza y de sangre, por la inspiración y la gracia. Trae en sus manos juveniles, y se dispone a llenarlo de nueva embriagadora esencia, aquel bote maravilloso cuyo penetrante aroma prodigó, hasta agotarlo, en el decurso de un tercio de siglo de liberal derroche de gitanería genial, su tío Rafael Gómez (el Gallo).
Cuando el arte sin parangón del lidiador viejo y glorioso comenzaba, por obra de los pícaros años y el destierro doloroso, a convertirse en recuerdo, he aquí cómo en este jovencillo nieto de Fernando y Gabriela se anuda con el pasado inolvidable en una realidad nueva, remozada y triunfal.
Rafael venció el domingo en buena lid. Breve y dominador, con cuatro eficacísimos pases con la derecha se hizo del primer novillo que, harto revoltoso, empujaba mucho. Muy pocos muletazos más, cerca y torero, y en seguida media estocada arriba, que bastó.
El kikirikí mañanero –en el alba de una fama nueva- vibró como un clarinazo rotundo en la lidia del cuarto bicho. Muy pocas veces habíamos visto verónicas tan hermosas como aquellas tres o cuatro que, adelantando la pierna, bajando los brazos ponderadamente y mandando en el toro durante el lance entero, engarzó Rafaelito, en cuyo estilo se fundían la gracia del Gallo, el temple de Gitanillo, la soberanía de Cagancho.
Después –ya en marcha una lidia en la cual se desvivió por evitar los capotazos superfluos- un admirable quite por garbosísimas gaoneras, hizo que la primera ovación reprodujese con nuevo estruendo sus clamores. Se vino abajo la res; en banderillas tendió a defenderse, y luego buscó el refugio de las tablas. El chaval comenzó la faena con un ayudado magnífico, de cuya calidad no desmerecieron los dos naturales y el alto dados a continuación. Un cambio de muleta por la espalda, lleno de gitanísimo donaire, y otras jugosas filigranas más completaron, siempre entre olés y aplausos, la lucida labor que algún día tendrá la superación soñada. Dos pinchazos y una estocada, siempre por derecho, y un descabello al segundo golpe. El artista recorrió el redondel para recoger una ovación grande. 
En otros instantes de la corrida, como en el bellísimo quite del tercero y alguno más en que su airoso capotillo zigzagueó con galanura y alegría no aprendidas, Rafael Ortega (Gallito) fue el torero nato, de casta, que jamás nos dejaremos arrebatar, porque en él pervive una dinastía que no debe prescribir. A menos que él mismo renuncie a sus derechos…”.

miércoles, 11 de noviembre de 2020

LA UBT REEDITA 'JOSELITO EN LIMA'

Portada de la obra.
La Unión de Bibliófilos Taurinos ha reeditado en este 2020 'Joselito en Lima', obra buscadísima por escasa, en la que se recogen las crónicas "de los diarios y revistas" limeños publicadas en la temporada 1919-20.

En el prólogo, Valentín Moreno Gallego, vicepresidente de la entidad editora, refiere  el porqué de la edición facsímil en la que se han respetado los anuncios publicitarios aparecidos en el original. Además, se reproduce una dedicatoria autógrafa para el mismísimo Joselito, al que se presume poseedor del ejemplar que ha servido de base para que los aficionados del siglo XXI podamos leer de primera mano lo que supuso la única excursión profesional del Rey de los Toreros a tierras americanas.

En definitiva, una obra capital que no debe faltar en la biblioteca de todo buen gallista que se precie. 


domingo, 8 de noviembre de 2020

'GALLEANDO' DE RAFAEL ORTEGA 'GALLITO'

 Siete años después de su primera incursión literaria, Rafael Ortega Gómez publica sus memorias bajo el título de 'Galleando'. Esta obra puede considerarse el complemento de 'Mi paso por el toreo' y en ella cuenta, principalmente, su etapa de luces.

También hay capítulos dedicados a dar su particular opinón sobre temas tales como la política en el toreo, las guerrillas, el toro, la prensa o el miedo. En las últimas páginas recopila poemas que en sus años de éxito le dedicaron escritores como Montero Galvache, Rafael Duyos o el mismo Gerardo Diego.

El libro se cierra con opiniones de periodistas como Manolo Liaño o Barquerito a propósito de la intervención del propio Rafael en el programa 'Autorrertrato' que, dirigido por Pablo Lizcano, se emitió en TVE el 10 de febrero de 1985 y al que La Gracia Toreadora le dedicó una entrada el 31 de mayo del presente año. 


Portada de 'Galleando'

miércoles, 4 de noviembre de 2020

'MI PASO POR EL TOREO' DE RAFAEL ORTEGA 'GALLITO'

 Rafael Ortega Gómez, conocido artísticamente como 'Gallito', fue el continuador de la saga de toreros teniendo buen ambiente en sus primeros años en la profesión. Ya retirado recopiló sus memorias en dos libros. 

El primero, 'Mi paso por el toreo', fue publicado por la editorial Alce en 1979 y cuenta un buen número de anécdotas y recuerdos de su familia. A través de las 208 páginas el lector revive a sus tíos Rafael, Fernando y José y a toreros con los que aquellos primeros Gallo tuvieron relación como fueron Lagartijo, Guerrita, Fuentes o Machaquito. Con Guerrita y Machaquito llegó a conversar el autor en alguna ocasión.

La figura de Juan Belmonte, y su especial rivalidad con José, ocupa uno de los capítulos más importantes del libro, ilustrado con buen número de fotografías. 

Portada del libro.


domingo, 1 de noviembre de 2020

RAFAEL, A HOMBROS EN MADRID

 La tarde del 30 de junio de 1912 Rafael se acarteló en Madrid con Pastor y Regaterín para despachar un encierro del Duque de Veragua que no alcanzó la gloria. La entrada fue floja pero el mayor de los Gallo cumplió con creces las expectativas creadas, a juicio de la crónica que Don Pepe firma en 'Arte Taurino':

"Hoy por hoy, en el Teatro, en la Prensa, en la Política y en el Toreo, los amos de Madrid y de España son Sainati, el Duende de la Colegiata, Romanones y El Gallo.

¡Y vive Dios que, para lo que es este chico, el día 30, tuvo una tarde completísima! En su primero, el fogueado, con solo cuatro pases, se apoderó del tostón, probando su gran maestría con los bueyes. Un pinchazo y una perpendicular, ambos pescueceros, bastaron para que Rafael viese doblar al del Duque.

Cabecera de 'Arte Taurino'.


En el cuarto, en aquel todo cuyo arrastre se aplaudió por su bravura y nobleza, se pone a torear Gallito por verónicas, y después de bailar y encorvarse en la mayoría, salió huyendo para la barrera. ¿Y este es el rey de los toreros, a quien un toro noble, del duque, TOREANDO DE CAPA, le hace huir? En los quites a este toro, estuvo como Vicente y Regaterín, fenomenal de bien. Gallito cogió las banderillas, y cambiando los terrenos infinidad de veces, mete un par superior. (Ovación). Con los trastos de matar en la mano, hizo una faena muy elegante y efectista, pero toda con la mano derecha, menos un natural muy bailado, y haciendo cambios de mano y zarandajas por el estilo, cuando han pasado los cuernos. Todo eso es muy bonito, pero no para armar una revolución, como la del 69, caballeros. El matador metió un gran pinchazo, y una pescuecera y tendenciosa, yéndose. (Gran ovación). Al final de la corrida, salió Gallito en hombros de sus admiradores". 


miércoles, 28 de octubre de 2020

SEGUNDA PRESENTACIÓN DE JOSELITO Y LIMEÑO EN SEVILLA: "¡UN ESCÁNDALO!"

Con estas dos llamativas palabras tituló 'Arte Taurino' la crónica en la que Kastrito relata lo que ocurrió en Sevilla el 24 de junio de 1912 cuando, apenas 24 horas después de su presentación, Joselito y Limeño volvieron a pisar el ruedo maestrante. Los siguientes párrafos recogen las apreciaciones sobre Gallito:

"Tarde de triunfo, consagración definitiva de un mozalbete imberbe que reúne en sí toda la grandeza, majestuosidad, arte y sabiduría que pueda soñar aficionado alguno. Mucho más aún. ¡Qué torerazo! ¡Qué fenómeno! Estas palabras y otras de encomio por el estilo son las que salían de labios de todos los concurrentes que llenaban en su totalidad el circo taurino sevillano. Joselito el Gallo ha triunfado esta tarde de manera ruidosa. Describir sus faenas, por muy detalladamente que lo hiciera, sería una débil muestra de lo que el hijo menor del gran Fernando ha ejecutado. Baste decir que, aun viéndolo hacer, me parecía no estar en mis cabales. Aquella vocecilla aniñada que mandaba a los subalternos, ordenándoles con perfecto conocimiento las faenas que habían de realizar en cada caso, debía ser la voz bronca de un torero que llevara mucho tiempo de andar entre las reses. Y, sin embargo, yo no soñaba, estaba en mi juicio; era, efectivamente, un chiquillo quien hacía todo eso y quien ante los bichos de Agüera ha llevado a cabo faenas asombrosas por todos conceptos, y muy particularmente por la ciencia demostrada. A cada toro de los cuatro que hubo de estoquear le ha dado la lidia requerida y ha obtenido el mayor lucimiento imaginable. ¿Y con el acero? Este no se llama Gallito. ¡¡Mata!! No quedaron sus estocadas y pinchazos en los propios rubios las nueve veces que entró a matar, pero en todas ellas lo hizo por derecho.

Con las banderillas, hoy no le ha acompañado la fortuna; pero, señores, ¡qué modo de preparar y adornarse! Y luego, qué facilidad para clavar! Entusiasmado he abandonado la Plaza, y con el mismo entusiasmo me pongo a escribir estas cuartillas para terminar de referirme a Joselito Gómez, Gallito III, diciendo: ¡Paso al héroe! ¡Paso al torero soñado! (...)

El ganado de D. Adolfo Agüera, bastante grande, fue, en conjunto, manso, pues ninguno hizo franca pelea. El mejor fue el sexto. Tomaron entre los seis veinticinco varas por ocho caídas y cuatro jacos arrastrados.(...)

Como se ve, volvió a repetirse el exitazo de la tarde anterior, constituyendo un verdadero escándalo los continuados aplausos que los muchachos escucharon durante toda la corrida."

Limeño también cosechó muchos aplausos pero fue cogido al entrar a matar al tercer novillo de la tarde, siendo atendido por los facultativos de una herida en el labio de tres centímetros de extensión, con destrozos de la caja dentaria. Se estimaba que su recuperación tardaría unas dos semanas.


Gallito entra a matar a su primer oponente.


De esta manera despachó Joselito al sexto.







domingo, 25 de octubre de 2020

LA PRESENTACIÓN DE JOSELITO EN SEVILLA SEGÚN 'ARTE TAURINO'

El número 67 de la revista 'Arte Taurino', de 2 de julio de 1912, recogía la presentación de Limeño y Gallito en Sevilla. En la crónica de Kastrito se habla de lleno con la reventa haciendo el agosto el 23 de junio. 

Dice que José se adornó en quites en el primer novillo, como todo el festejo de Moreno Santamaría,  y en el segundo..."cárdeno obscuro, escaso de herramientas... 

Joselito El Gallo lo torea por verónicas y navarras de modo maravilloso y el público lo aclama entusiasmado. El bicho, con voluntad, cumple en varas. 

Gallito toma los palos y como un profesor clava un par al cambio. (Ovación). Después dos medios pares llegando muy bien.

Con la muleta hace una primorosa faena para un pinchazo metiéndose valiente. Sigue toreando bien al bicho, que está nobilísimo y manejable, para dar otro pinchazo en lo duro. Otro pinchazo. La faena se hace pesada. Teniendo el torillo la cara vuelta, mete una caída y atravesada, y descabella a la primera. (Ovación al torero). (...)

Cuarto.- Negro entrepelao y mogón de ambos pitones.

Toma cuatro varas por una caída. Limeño y Gallito escuchan continuados aplausos, especialmente este último. El menor de los Gallos vuelve a tomar los rehiletes y al cuarteo clavó un par caído. Magritas y Almendro cierran bien el tercio.

Le Petit Chantecler emplea seis pases, a cual más lucido y valiente, para un volapié por las agujas que tiró al de Moreno patas arriba. (Enorme ovación).

El público pide la oreja, pero no se concede. Un individuo bien trajeado se arroja al ruedo y, rodilla, en tierra, besa la mano al espada. Después le abraza y deposita otro ósculo en la mejilla. (¡Malo!... ¡Malo!). (...)


Sexto.- Cárdeno, más chico. A la salida recibe tres refilonazos. Demostrando mansedumbre, aguanta dos varejas y se orden el tueste.

Magritas y Cuco foguean bien. Gallito, aunque movido, torea cerca al mansote. Agarra una corta caída y atravesadilla. Tras algunos pases intenta el descabello, acertando al segundo golpe. 

Resumen: un buen debut".

Quiebro de rodillas de Joselito en su debut hispalense.
(Foto: Arte Taurino)

miércoles, 21 de octubre de 2020

¿QUÉ HARÁ USTED EN 1916?

 '¿Qué hará usted en 1916?' es la pregunta que se hacía 'The kon leche' el 3 de enero sobre lo que podría deparar la temporada que ya estaba a la vista a los coletudos más destacados del momento. 

Con los consabidos ripios concebidos por Curro Castañares, se pone en boca de los hermanos Gallo las siguientes respuestas:


Entre mi hermano y yo

ante la afición entera

probaremos que no hay quien

pueda derribar la CRESTA.


                                       (Rafael El Gallo)


Edificaré este año

un almacén en mi huerta

para poder archivar

los rabos y las orejas...


                                            (Joselito El Gallo)


Cabecera de la revista.

domingo, 18 de octubre de 2020

VATICINIOS GALLISTAS PARA 1916

'The kon leche', en su primer número del año 1916 publicado el 3 de enero, incluía el siguiente artículo, titulado 'José Gómez Ortega: 1916", en el que dejaba meridianamente claro quien mandaba en el toreo en aquel momento. Baste decir que José tenía solamente 20 años...

" E

l que más arriba está,

¡El Papa! ¡El emperador!

al que todo el mundo va

a solicitar favor...

¿Por qué será?


No creáis, lectores maliciosos, que vamos a adelantar el año taurino de Joselito antes de haber transcurrido la temporada. No. No somo adivinos... pero somos sinceros y aficionados de buena orientación, como lo demuestra el triunfo constante de nuestros puntos de vista taurómacos.

Defendimos el triunfo definitivo de Joselito el Gallo, apenas tiró el primer capotazo en la famosa novillada del 13 de junio de 1912. Y abonamos en estas columnas al niño maestro contra el consagrado Bombita. Y auguramos igualmente su victoria sobre el competidor Belmonte.

Todo se ha realizado según nuestras predicciones. Así llega el año nuevo y sobre la cumbre no hay figura más brillante que la de Gallito. Por eso escribimos al comienzo, José Gómez Ortega: 1916.

Por defender esta tesis de claridad meridiana, incontrastable, nos llaman gallistas... ¡Como si la verdad pudiera tener más de un camino!

José triunfa de novillero, como no triunfó jamás novillero alguno: asombrando con la extensión de su repertorio, dominio del arte y brillantez de ejecución. Frutos todos estos de la maestría y la experiencia, parecía imposible su revelación en un muchacho de diez y siete años.

Mostrar valentía en los años mozos es empeño vulgar mil veces repetido. 

Borrar en un año a toda la torería existente, es obra magna solo explicable en un genio de la tauromaquia.

Y eso es lo que hizo Joselito Gómez en 1913: su primer año completo de doctorado.

Y mantener en 1914 su prestigio sin decadencias ni desmayos de ningún género, a pesar de sus dos cogidas de Barcelona y Bilbao a la HORA GRANDE: entrando a matar.

De lo realizado por el coloso gelveño en 1915 no hay que ocuparse...  Está en la memoria de todos.

Batir al rival Belmonte en Madrid, en Sevilla, en Zaragoza, puntos culminantes de la temporada y obtener la completa victoria con clamorosos triunfos jamás igualados por torero alguno.

Las siete orejas de Madrid... ¡La única cortada en Sevilla!... ¡La faena insuperable, clásica, en unos lances, genial en otros, brava y definitiva siempre, realizada en Zaragoza!... Botones de muestra que prueban nuestra afirmación y robustecen nuestro criterio... Ese es el torero de año... 

¡José Gómez Ortega: 1916!

El más grande, torero cumbre, papa de la tauromaquia, dicen que maneja a su antojo el cotarro taurino... 

No sabemos nada.

Pero si así es... ¡Sus motivos habrá para que ocurra!

Si hace y deshace, si zurce voluntades, lima asperezas y levanta vetos... será... ¡Porque es el más grande!

Algo parecido nos cuentan de Curro Montes, amo y señor del toreo de su tiempo.

Cosa análoga alcanzamos a presenciar hace veinte años cuando Rafael Guerra, el gran maestro de Córdoba, hacía y deshacía en los toros cuanto le venía en gana.

Ahora dicen los belmontistas que Joselito manda, impera y abusa como un rey absoluto...

Pues si lo hace es... ¡Porque puede!

En algo habían de reconocer los aficionados 'trágicos' la grandeza de Joselito...

 El que más arriba está,

¡El Papa! ¡El emperador!

al que todo el mundo va

a solicitar favor...

¿Por qué será?"

Caricatura que
acompañó al texto.



miércoles, 14 de octubre de 2020

PACO AGUADO, REFERENTE DE LA LITERATURA GALLISTA

Hace unos meses vio la luz una nueva versión de 'Joselito El Gallo, Rey de los Toreros' de Paco Aguado, obra cotizadísima por inencontrable, que apareció en las librerías en 1.999. Veintiún años han tenido que pasar para, coincidiendo con el centenario de la desaparición del gelveño, se colmaran los deseos de cuantos aficionados se quedaron con las ganas de tenerla. 

Aguado, además de satisfacer una necesidad vital del gallismo militante, ha revisionado cuanto escribió aportando nuevos datos y puntos de vista sobre la vida y la obra de José. Bajo el epígrafe de ocho fechas capitales en la trayectoria del protagonista, analiza concienzudamente lo mucho que aportó a la Tauromaquia y ese nuevo enfoque que comenzó a darle, para adaptarla a los nuevos tiempos de hace un siglo, que solo pudo truncar la desagracia de Talavera. Aún así, plazas, ganaderías y conceptos de la lidia, amén de la puesta en valor de la figura del apoderado, perviven hoy en día gracias a su iniciativa. 

Por momentos da la sensación que Paco abusa de las digresiones. Nada más lejos de la realidad. Ese hilo argumental que parte de José no es más que la explicación del porqué de muchos hechos relevantes en la historia taurina de principios del veinte que la agilidad mental y, una visión global de los hechos, le permite al autor analizarlos en profundidad. 

Tuvieron que pasar setenta y nueve años para que Joselito tuviera una biografía ajustada a los hechos, que contase sus hazañas y desvistiese al héroe de su traje de luces para presentar al hombre de carne y hueso, con sus preocupaciones y desencuentros con una élite social sevillana que no lo admitía más que en el ruedo. Y veintiún años más, cien en total, para que la obra quedase culminada. Justicia, se llama. Ahora sí, puede afirmarse sin equivocación, que Joselito El Gallo, remedando a aquel coronel salido de la imaginación de García Márquez, sí tiene quien le escriba. Paco Aguado. 

La guinda la pone Luis Francisco Esplá en un delicioso y breve prólogo, que no pretende más que introducir la obra, reverdeciendo sus tiempos de seda y oro en los que saludaba al toro con unos breves, pero buenos capotazos.

domingo, 11 de octubre de 2020

BELMONTE, GALLITO Y EL TENOR GIUSEPPE ANSELMI

Joselito y Belmonte estaban en la cresta de la ola en 1.916. Por ello ningún revistero que se preciase podía prescindir de nombrarlos en sus escritos. En una revista taurina, 'The kon Leche', se recoge el siguiente comentario uniendo las figuras de los coletudos con las actuaciones poco afortunadas del tenor siciliano Giuseppe Anselmi en el teatro Real de Madrid.

Giuseppe Anselmi

El artículo, de tono jocoso, se publicó en el número 206 aparecido el 13 de marzo:


BELMONTISTA Y GALLISTA


En 'La Esfera' publica 'El Caballero Audaz' una interviú con Anselmi, el tenor famoso del teatro Real. 

Y en el calor de la descripción campestre nos cuenta el cronista que saltando y brincando por el Pardo el célebre cantante imita a Belmonte dando recortes a un toro imaginario...

¡Hola!

Lo que no aclara el reportero es dónde radica la imitación a Belmonte. 

¡Imita Anselmi a Belmonte por lo que se ciñe... o lo imita por lo imaginario del toro!

Porque no dudarán ustedes que algunos de esos toritos, del fenómeno de la emoción, sin edad y sin peso, son toros 'imaginarios'.

¡Tan imaginarios como el de Anselmi cuando menos!

Divagaciones aparte, el Audaz ha querido significarnos, sin duda, el belmontismo del 'divo' italiano.

Y nosotros, de buena creemos que, en efecto, Anselmi es 'belmontista'...

Pero es cuando pasea por el campo.

En el teatro Real, por el contrario, se cambia la casaca... y se hace 'gallista' rabioso.

Porque esa buena persona

que de ser, por ahí blasona

el mejor tenor del mapa...

...¡Cada 'gallo' se le escapa,

que es un capón de Bayona!