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miércoles, 28 de febrero de 2024

RAFAEL REPITE EN BILBAO

Portada de la revista. (Foto: hemerotecadigital.bne.es)
Rafael, como se recoge en la entrada anterior de este blog, toreó en Bilbao la tarde del  1 de mayo de 1906 con Bombita. La pareja repitió al día siguiente, pero esta vez el ganado fue de Teodoro Valle. 'La Fiesta Nacional' publicó el 14 del mismo mes la siguiente crónica firmada, como la anterior, por K. PITA:

"En la corrida del día 2 se lidiaron 6 toros de D. Teodoro Valle que no resultaron, ni con mucho, tan bravos y duros como los de Saltillo. Sin embargo, no dejaron mal puesto el pabellón salamanquino. 

 BOMBITA. Se limitó a cumplir (mejor dicho estaría a salir del paso) y como queriendo poner de manifiesto que la asaura se va apoderando de él. ¡Rediez; y qué conservadores se vuelven estos astros en cuanto tienen un par de cortijos y cuenta corriente en el Banco de España! 

 GALLITO. Vamos: en la segunda corrida y hasta el cuarto toro ya nos enseñó algunas cosillas buenas de esas que se aplauden sin reservas. Con estoque y muleta trató de conquistar el tercer puesto de nuestras famosas corridas de feria y según parece lo ha conseguido en parte, pues según rumores la Comisión de la Plaza ha quedado bien impresionada de la labor de ambos empleada por Gallito." 

miércoles, 14 de febrero de 2024

RAFAEL EN LA MIURADA DE CASTELLÓN DE 1905: OTRA CRÓNICA (Y III)

En esta segunda crónica, Francisco Moya da sus impresiones de lo que aconteció en el mano a mano entre Lagartijo y Gallito celebrado en Castellón el 25 de marzo de 1905. La crónica apareció en la revista 'Sol y sombra' el 6 de abril:

 Siempre fue la de Castellón la plaza que cierra y abre el curso taurino. 

 Este año desconté, desde hace tiempo, el que, siguiendo la costumbre, pudiera celebrarse ningún espectáculo de alguna seriedad o presupuesto, por razón de la crisis económica por que atraviesa esa provincia. La naranja, fruto de riqueza de la misma, vióse toda helada de un día para otro, llevando la desolación a miles de familias. 

 Aquel huerto frondoso y sin interrupción, cargado del más simpático de los frutos, por que atravesaba el tren, no es hoy más que un montón de leña amarillenta, destacándose de la misma, por su soledad, millares de naranjas abandonadas.

Por esta poderosa razón, supuse que este año en la feria de la Magdalena faltaría al programa su célebre corrida de toros; pero me equivoqué. En el programa figuraba ésta, con toros nada menos que de D. Eduardo Miura y como matadores Lagartijo chico y Gallito. Había surgido una empresa valiente que, con más afición a nuestra fiesta que miedo a las pérdidas seguras, arrostró con todo, y Castellón no perdía la prioridad de abrir y cerrar el curso taurino. La animación fue grande y de Valencia no faltaron algunos miles de aficionados, viéndose la plaza con más público que el que se esperaba y sus palcos repletos de las mantillas clásicas en esta fiesta, sirviendo de marco a caras que al sol dan envidia. Y la certeza de esta afirmación mía, está en que al ocupar los palcos mis bellas paisanas, el sol se cubrió, no tardando en obsequiarnos con una ligera llovizna. La fiesta nacional se celebró, y allá va lo que fue: 

Los toros de Miura estaban bien presentados, y en conjunto dejaron satisfecha a la asamblea. 

 El primero era un bonito toro en lo que respecta a tipo y defensas; pero en el primer tercio se limitó a cumplir, buscar el callejón a la tercera vara de las cinco que tomó, a cambio de un porrazo, y a llevar la cabeza más suelta que un chivo de dos días. 

 A banderillas difícil, y entre esto y el sobón de los peones, llegó áa manos de Lagartijo chico como digan dueñas. 

Este, de negro y oro, le toreó con la derecha, viendo en este toro al animal más difícil que tocarle pueda en lo que resta de temporada, consignándolo así el público. Pinchó una vez, y acabó de media estocada caída. ¡Vaya un animalito que se quitó de delante el de Córdoba! 

 El segundo fue el toro más bravo y noble de la corrida. En el primer tercio tomó siete varas por tres caídas y tres acémilas, dando lugar a que los matadores entablaran competencia en eso de los adornos. 

 Sevillano coloca un buen par. 

 Gallito, de azul celeste y oro, principió con un pase ayudado y uno en redondo. Siguió un muleteo movido, sin causa ni razón justificada, dio un pinchazo, y terminó de media estocada buena. (Aplausos.)

En tercer lugar salió un  toro largo, fino y levantado. Hizo una buena pelea en el primer tercio, aguantando seis lanzazos por cuatro caídas y un penco. A la muerte llegó noble hasta dejárselo de sobra, dando con esto ocasión a que Lagartijo chico le toreara de muleta sobrio y con tranquilidad. Le toreó por abajo según indicaba el estado del toro, y después de dos medias estocadas, entró al volapié con muchos redaños, dejando una monumental estocada, de la que salió el toro muerto de las manos. ¡Olé los niños entrando a matar! 

Gallito ante el cuarto. (Foto: Sol y Sombra)
 El cuarto llevaba el tipo legítimo de la casa. Tomó cinco varas, por tres caídas y dos caballos. Esto es decir que a pesar de su tipo era mansurrón. Se banderilleó a la media vuelta, y Gallito le toreó de muleta con la derecha y sin lucimiento y con despatarramiento. Pinchó bajo y acabó de una esto cada delantera, con derrame externo. Intercalando en esto un achuchón con abandono de mercancía y fuga... de vocales. 

El quinto toro fue el que más satisfecha dejó a la concurrencia. Seco en el arranque, de poder, certero y bravo. Pedir más sería gollería. ¡Vaya un toro! Tomó sus siete varas, dio siete porrazos y mató seis caballos. Los matadores se arrodillaron, tocaron el testuz y amenizaron la lidia de tan bravo animal. Tomaron los palos los maestros, y aquí hubo su pequeño incidente entre ellos, que llegó al público, gracias á Gallito, que proporcionó una bronca á Lagartijo chico. 

Lagartijo entrando a matar. (Foto: Sol y Sombra)
 Antiguamente y cuando los matadores tomaban los palos y había más compañerismo, era sencillamente con la sana intención de buscar el lucimiento, sin perjudicar al que debía estoquear aquel toro. Hoy las cosas cambian, y si se toman loa palos, es para pasarse un cuarto de luna en preparaciones y saliditas en falso y que llegue a manos del compañero con resabios. Esto el público no lo comprende y de ahí que se ponga al lado del matador de las sanas intenciones, creyendo que es orgullo o falta de compañerismo el que deje o no banderillear al que con él figura en el cartel. Tres toros corresponden a cada uno; si se tiene voluntad de lucirse con los garapullos, puede elegir si quiere el primero o el último, cuya muerte le corresponda. A tal conclusión ha llegado o debe llegar las intenciones sanas de les toreritos que hoy padecemos, sin exclusión. 

 Lagartijo chico, como Gallito dejaron un buen par al cuarteo. El primero de éstos muleteó a este toro con pases por abajo, se arranco bien a matar y dejó un pinchazo hondo, dos en hueso y una estocada hasta lo rojo de la empuñadura. 

 El último salió aplomadote, y antes de aparecer en el ruedo se presentó en escena un émulo, provisto de muleta, de la cual no pudo hacer uso por entregarle Lagartijo chico a las autoridades con trastos y todo.

 Este toro no fue gran cosa, aceptando cuatro varas por una caída y dos caballos. 

Gallito, con ganas de acabar, entró a matar al tercer pase, pinchando; repítese la escena, pero esta vez perdiendo los papeles el matador. Entra de nuevo al cuarteo, para media estocada delantera y atravesadilla y acaba de una entera. Todas las veces que entró a matar en este toro, lo hizo sin esperar a que igualara; así resultó ello. 

 Y como me he extendido demasiado, no entro en consideraciones menudas que alguien me agradecerá.

miércoles, 7 de febrero de 2024

RAFAEL EN LA MIURADA DE CASTELLÓN DE 1905: LA DESENCAJONADA (I)

El 25 de marzo de 1905 Castellón celebró su tradicional corrida magdalenera. En los corrales, tras no pocas incidencias, seis toros de don Eduardo Miura esperaban a sus matadores: Rafael Molina Martínez 'Lagartijo' y Rafael Gómez Ortega 'Gallito'...

Cuenta 'La Correspondencia de Valencia' del martes 21 de marzo que el domingo anterior se celebró en el coso de Ribalta la desencajonada...:

"Los dos primeros bichos fueron desencajonados sin novedad y lo propio sucedió con el tercero, que pasó inquieto y buscando pelea al primer corral. Al abrirse la puerta que comunica al segundo corral, los toros segundo y tercero se embistieron y al tropezar lo hicieron con tal fiereza que los dos quedaron muertos en la misma puerta. Uno tenía fracturado el cráneo y el otro quedó desnucado. 

El público, que estaba entusiasmado de la hermosa lámina de los bichos, sufrió la natural sorpresa de aquel nuevo espectáculo que tan caro ha costado a la empresa. 

El cuarto bicho, bonito animal, dio un salto tan tremendo que colocó las patas encima de un burladero; después embistió al primero que había sido desencajonado, produciéndole una pequeña herida. 

Los dos restantes toros se desencajonaron sin novedad. 

El público presenció cómo sacaban de los corrales los dos toros muertos.

La empresa telegrafió enseguida al ganadero para que dispusiera que mañana salgan para Castellón dos toros más de Miura. 

Aquí no se habla de otra cosa, lamentando todo el mundo lo ocurrido, y la empresa ha pedido dos buenos toros cuesten lo que cuesten. 

Los toros que quedan en el corral están muy bien criados, bonita y fina lámina, muchas libras y bien armados. La corrida promete."

"Acaba de recibirse un telegrama del ganadero Sr. Miura diciendo que esta mañana han salido de la ganadería, para ser embarcados, dos toros superiores que sustituyan a los dos muertos. 



 

miércoles, 13 de diciembre de 2023

TRIUNFO DE RAFAEL EN MÁLAGA

 

Crónica aparecida en 'El Noticiero Sevillano', de la novillada celebrada en Málaga el 2 de julio de 1899 en la que Rafael Gómez 'Gallito' lidió astados de Peñalver en compañía de Pulguita:

"De los novillos de Peñalver jugados esta tarde, tres fueron buenos y dos medianos. Al sexto lo fogueraron. 

Mataron siete caballos, tomando 29 puyazos.

El primero lo tomó de capa, a la salida, Gallito, dándose tres verónicas superiores, parado, reuniendo y jugando muy bien los brazos.

En los quites, hízoles ceñido y adornándose, rascando el testuz al de Peñalver.

Banderillearon admirablemente Sagasta y Ochoa, cuadrando en la cabeza, dejando tres pares en lo alto.

Pulguita, después de varios pases en corto, cogió una estocada buena, que le valió justa ovación y la oreja.

En el segundo lúcese Gallito tomándole de capa, haciéndolo tres veces parando, cuatro de frente y por detrás y otro buenísimo limpiando la boca al toro.

Banderillearon notablemente Pepito y Chicuelo, siendo aplaudidísimos.

Gallito muleteó ceñido, dando varios pases de pecho, otro con la izquierda y uno de molinete, entrando en corto y cogiendo un soberbio volapié en las mismas péndolas y hasta la bola, que hizo innecesaria la puntilla.

Sale el tercero y lo lancea Pulguita, haciéndolo bien. (Palmas)

Gallito hace un buen quite, rematando, poniendo la montera en el testuz.

Con tres pares buenos adórnanlo Zocato y Ortega.

Pulguita brindó al conocido aficionado señor García del Cid, para seis pases con la izquierda, uno con la derecha y tres nuevamente con la izquierda, de castigo, cogiendo una estocada hasta la mano, entrando bien.

La faena vale al espada una merecida ovación y un regalo del señor García del Cid.

Sale e cuarto, que fue gacho y con muchos pies.

Gallito le da el quiebro de rodillas superiorísimamente dos veces, sufriendo en el último algunos varetazos en la cintura que le hicieron rodar. (Gran ovación).

Parearon muy bien Sagasta y Zocato. Este último resultó cogido a la salida, siendo volteado aparatosamente. Retirado a la enfermería se le apreció un puntazo en el cuello de dos centímetros de extensión y un varetazo en la región glútea.

Gallito toma la muleta y pasa a la res, que está quedada, y la despacha de media estocada, un pinchazo, una buena y un descabello. (Grandes aplausos).

El quinto fue de poder y respeto, Gallito le da tres verónicas clásicas, tres de frente por detrás y un recorte, siendo aplaudido.

En quites lúcese, lo mismo que Pulguita.

Banderillean los matadores, y hácelo Gallito adornándose estilo Guerra, dejando un buen par, cuadrando en la cabeza.

Sigue Pulguita con uno bueno.

Este brinda a la gente del sol, y pasando nueve veces (el toro está quedado y tapándose), coge un pinchazo sin soltar, media estocada buena y contraria y un descabello.

El sexto se declara manso desde el primer momento, Gallito lo recorta, capote al brazo, primorosamente, siendo aplaudido.

Después de tomar una vara es condenado a fuego, quemándolo tres veces Chicuelo y Ochoa, haciéndolo bien.

Gallito chico al primer pase, de pecho, bueno y ceñidísimo, sale achuchado y con la taleguilla izquierda rota.

Sigue con diez pases de cerca y consintiendo al buey, para media estocada recibiendo, dando en hueso.

Repite con otros dos pases y vuelve a  meter el estoque recibiendo. Descabella.

Por coronación obtiene una ovación ruidosa, siendo sacado en hombros.

La afición se muestra sorprendida del asombroso toreo del hijo de Fernando Gómez, recordando la escuela de este inolvidable torero.

El público desea ver a aquel nuevamente.

Pulguita satisfizo a los aficionados. 

La entrada, buena". 


domingo, 4 de septiembre de 2022

OTRA DÉCIMA PARA RAFAEL, TODAVÍA NOVILLERO...


Continuando con la obra referenciada en la entrada anterior, 'Toros, toreritos y torerazos', Manuel Serrano García-Vao dedicó otra de sus famosas décimas a glosar la personalidad de Rafael Gómez 'Gallito':


Rafael Gómez (Gallito) 


 Muy grande como torero; 

 pero con un miedo tal, 

 que siempre concluye mal 

 este joven novillero. 

 Lleva muy mal derrotero 

 y sólo se arreglaría 

 si pudiera ser que un día 

 dieran toros sin pitones. 

 ¡Lástima de condiciones 

 dentro de un alma tan fría! 

domingo, 28 de agosto de 2022

DISCRETA TARDE DE RAFAEL EN LA MAESTRANZA... CON DOS ESPONTÁNEOS ACTIVOS

Regaterín.
'Sol y Sombra' publicó el 25 de julio de 1.901 la siguiente crónica de una novillada celebrada en Sevilla con la participación de Rafael Gómez 'Gallito' y Regaterín ante astados de José Clemente. Al parecer de Olmedo no fue una buena tarde del niño de la señora Gabriela y no faltaron los incidentes, en los que dos espectadores se erigieron en parte activa del espectáculo:

Sevilla.—Con una entrada buena y con un calor desesperado se verificó en nuestro clásico circo la anunciada corrida de novillos, la tarde del 7 del corriente, en la que se lidiaron seis toretes de D. José Clemente, el de Trigueros, de los que cuatro fueron mansos, quemándose el cuarto. Sólo se arrastró un caballo. 

 Como matadores figuraban en el programa «Regaterín» y «Gallito» (Rafael). «Regaterín» es un chico que tiene voluntad, pero que tanto el capote como la muleta, los maneja con poca soltura y sin conocimiento de causa. A matar entró siempre derecho, pero jamás llegó a reunirse y siempre metió el pincho tendido. 

 En cuanto a «Gallito...» mucho se movió el chico, toreando con adornos y alegría que entusiasmaron a los «impresionables», pero no paró nunca y toreó siempre encorvado. Sólo en su primero dio tres pases superiores, rematados y clásicos. En banderillas quiso cambiar en silla, y ni el inventor de esa vistosa suerte la hubiera conocido, porque no se colocó en el terreno debido y se vio obligado a salirse de su sitio por echársele el toro encima; consecuencia lógica de la mala colocación. 

 Matando... ya se sabe lo que mata «Gallito». 

 A excepción de la segunda vez que entró a matar en el último toro, porque éste le ayudó, en las demás se le vio cuartear siempre y pinchar bajo y atravesado. 

 Hubo durante la lidia dos toreros espontáneos; uno que quiso dar el cambio a puerta de gayola y salió herido gravemente en un brazo, y otro que clavó dos pares de las cortas, entrando las dos veces a la media vuelta, lo cual demuestra que no es un aficionado valiente, pues el novillo estaba hecho un borrico. 

 Y . . . nada más.

miércoles, 17 de noviembre de 2021

RAFAEL CUMPLE EN ALICANTE POR SAN PEDRO DE 1910

La revista 'El Enano' publicó en su número 17, de 3 de julio de 1910, una reseña firmada por 'El de la Huerta', donde se recogía lo que dio de si la corrida celebrada en Alicante el 29 de junio:

 

Rafael, en una foto de la época. (El Enano)

Seis toros de Bañuelos: matadores, Vicente Pastor, Gallito y Mazzantinito. Asisten cinco bandas de música. 

La plaza se encuentra llena de gente. 

 Primer toro, toma cinco varas, da tres batacazos y mata un caballo. 

 Morenito y Pepín, valencianos, colocan tres pares y medio. 

 Vicente Pastor muletea bien y de media estocada en lo alto y un descabello, termina. (Palmas.) 

 Segundo, Gallito veroniquea como los ángeles y el bicho toma seis varas. 

 Pinturas y Gallito menor banderillean, y Rafael, el verdadero Gallo del toreo actual, empieza pasando de rodilla, continuando inteligente, entrando corto y derecho para dar media buena, un pinchazo, acabando con otra media estocada. (Palmas.) 

 Tercero, acepta cuatro puyazos. Mazzantinito ejecuta por tres veces la suerte de quebrar con banderillas, dejando dos y medio pares, siendo ovacionado.

El Sordo aprovecha y coloca un buen par. 

 Mazzantinito torea entre los pitones del grandote Bañuelo, al que mata de dos medias estocadas y un descabello. (Muchas palmas.) 

 Cuarto, seis picotazos, cuatro pares de banderillas de Arango y Morenito, una buena faena de muleta de Pastor, y media en las agujas y un descabello del propio Vicente. (Ovación al chico.) 

 Quinto, cinco puyazos. A petición del público parea Gallito colgando un gran par. 

 Rafael brinda a un tendido de sombra, y toreando cerca dando un pinchazo y media buena que mata al de Bañuelos (Ovación.)

Sexto, toma seis varas. 

 Los espadas lucidísimos en los quites. 

 Mazzantinito brinda al Club La Peña, y pasa bien y desde cerca al manso colmenareño al que mata de cuatro buenos pinchazos y un certero descabello. Gian actuación al madrileño. En vista de su éxito, el Club le ha obsequiado con un banquete. 

domingo, 26 de febrero de 2017

TRIUNFO DE UN JOVEN RAFAEL EN LA MAESTRANZA

Gallito en su primer toro. (Foto: Almela)
El día de San Pedro de 1.899 se celebra en La Maestranza de Sevilla una novillada con reses de Celsa Fontfrede en la que se anuncia a los Niños Sevillanos Algabeño Chico y Rafael Gómez 'Gallito'. Por indisposición del primero entra en el cartel a última hora Pulguita Chico.

La revista 'Sol y sombra' publica el 20 de julio una extensa crónica firmada por Pesares que reproducimos en su integridad:

"Ni el 24, ni el 25, á pesar de haberse anunciado con mucha prosopopeya y escándalo.
Los cordobeses estaban enfermos y la empresa no quiso dar la venia á ninguno de los novilleros que la solicitaban.
En Sevilla andamos al revés, y por eso este año, que por ahí es el mejor de toros, aquí resulta el más desgraciado, gracias á nuestra empresa.

Por fin, dos horas antes, como quien dice, de las cinco de la tarde del día de San Pedro, se anuncian los niños sevillanos Gallito y Algabeño chico, con reses de Dª Celsa Fontfrede, y cuatro minutos antes de empezar, se teme que Algabeño chico enferme y se le sustituya con Pulguita chico.

Así es, que á pesar de los 7 reales en sombra y casi 4 enfrente, pocos estábamos pasando fatigas en el circo. Presidieron la fiesta Palomino y sus congéneres Canavachuelo y Esquivia.

Primer bicho, negro gacho, gordo. Corría mucho; Gallito al pararle los pies, salió achuchado, salvándolo Pulguita. Ambos espadas compitieron en quites, oyendo palmas. Contrario clavó dos buenos pares, y el Niño del Buzo uno y medio. Pulguita, de verde y oro, ayudado muy mal por los peones y medianamente toreado por él, lo remató de un pinchazo hondo atravesado, media delantera, varios intentos y desarmes, otro pinchazo, un aviso y un descabello.

Gallito en su segundo toro. (Foto: Almela)
Segundo, negro bragao. Gallito lo toreó con cuatro magníficas verónicas y dos recortes, siendo ovacionado. La plaza estuvo hecha un herradero durante el primer tercio, en el que el bicho mostró ser manso. Gallito, en los quites recordó los mejores tiempos de su padre. El Chicuelo puso un gran par. Gallito, de morado y oro, comienza con un gran pase de pecho, rompiéndole el bicho la muleta. Torea después de cerca y con valentía, cogiendo media tendida, caída y atravesada, un pinchazo,  otro bueno, otros dos, una entera atravesada, dos intentos y descabello a pulso (Ovación),

Tercero, cárdeno nevao. Pulguita perdió el trapo al lancear.  El bicho tomó cinco varas, dio cuatro caídas y mató dos pencos. Gallito, hecho un verdadero maestro en los quites al caer Pulguita en la cara del toro lo salvó con mucho arte y valentía, siendo aclamado con entusiasmo. Pulga toreó regularmente, dando un pinchazo y media buena, ganando palmas. 

 Castaño albardao era el cuarto y grande. Cinco varas por dos caídas y un penco muerto. El bicho llegó aplomado, y Gallito lo toreó parando y consintiendo, agarrando una atravesada y tendida, un pinchazo bueno, sufrió un desarme, dio otro pinchazo y media buena, oyendo palmas 

Gallito dio el quiebro de rodillas al quinto, ceñidísimo y con mucho arte, cambiando después capote al brazo y haciendo admirables quites. Rafaelito coge los palos y se adorna de manera magistral, quebrando con mucha vista sin clavar, haciéndolo después de frente de una manera soberbia. El pueblo batió palmas lleno de asombro, convencidísimo de que este petit torero, es digno sucesor de su inolvidable y desgraciado padre. 

Pulguita clavó un gran par y despachó al quinto previos dos desarmes y algunos muletazos, un pinchazo en una banderilla y una estocada baja. 

Al sexto lo lanceó Gallito y toreó al alimón con Pulguita. Gallito, para que nos quedara el gusto en los labios, toreó de muleta magistralmente, y en la suerte contraria, dio una estocada recibiendo y descabelló al tercer intento, siendo arrebatado por el público y llevado en brazos hasta el coche.

Resumen: Gallito es un torerito, que si sigue por el camino emprendido, reverdecerá los gloriosos triunfos de aquel gran torero, su padre, Fernando Gómez, El Gallo".

miércoles, 30 de abril de 2014

PETARDO REGIOMONTANO DE RAFAEL

La revista.
El 15 de febrero de 1.908 Rafael Gómez toreó en la inauguración de la plaza de toros de Monterrey (México) en compañía de Enrique Vargas Minuto. Los diestros españoles despacharon astados de Guanamé y Malpaso rivalizando ambos en actuaciones desafortunadas, tal como refiere Juanerillo en el número 203 de La Fiesta Nacional, publicación que se editó en Barcelona el 23 de abril del mismo año.


Gallito.
Minuto.
Rafael Gómez Gallito no quiso ser menos que su compañero y compartió las rechiflas de hoy con Minuto, no le vimos al hijo de Fernando la alegría y arte que en otras ocasiones nos ha demostrado, hoy salió con ganas de no hacer nada y lo consiguió, apático hasta más no poder, desabrido en todo, y hasta un lunar más negro que su compañero tuvo y éste fue el dejar vivo a uno de sus toros, esto es (uno de sus chotos) y el que después de pincharlo convirtiendo aquello en un repugnante cuadro, debido a que Rafaelito lo tasajeó como su santa jindama le dio a entender, y como ya digo le fue vuelto al corral ¡qué vergüenza! Dónde está esa vergüenza torera amigo Rafael, es que írsele vivo un choto inofensivo en plena inauguración de plaza, eso se deja para estos saltimbanquis que por aquí nos estropean, pero para un matador de cartel no puede ser. Si fatal estuvo este chico hoy, más malo no se puede estar en plaza alguna, y de manifiesto están sus esetruendosas protestas que tanto en la plaza como fuera de ella le obsequiaron a él y a su compañero Minuto pues en la calle les obsequiaron los villamelones del departamento cálido con una llvia de pedradas que corrieron grave peligro de ser heridos. ¡Valiente inauguración!

Vergüenza me da contarlo
y hasta creerlo no puedo
que los maestros de hoy
murieron de puro miedo.




domingo, 2 de febrero de 2014

LOS REPRESENTANTES DE LOS GALLO EN 1.906

Cabecera de El Enano de 29 de abril
Las revistas taurinas de principios del siglo XX tenían por costumbre anunciar los "representantes de los matadores de toros y novillos a quienes pueden dirigirse las empresas para ajuste", según reza la nota explicativa aparecida en El Enano publicado el 29 de abril de 1.906.

La relación de posibles contratados no era muy extensa si la comparamos con la actual. Entre los matadores de alternativa se contaban 32 espadas y el número de novilleros ascendía a 34. Dos gallitos, Rafael y Fernando aparecían en ambos escalafones de la siguiente manera:

Matadores de toros


Rafael Gómez (Gallito).—A su nombre, Sevilla. 

Matadores de novillos 


Fernando Gómez (Gallito chico).—D.Vicente Sánchez, Amparo, 29, 2.°Madrid.


domingo, 15 de diciembre de 2013

EL HEREDERO DE GALLITO

La revista madrileña Pan y Toros publicó en el número 54, de 12 de abril de 1897, un interesante artículo firmado por Don Cecilia en el que daba las primeras impresiones sobre el Divino Calvo, que por esa época había debutado ante el público. La publicación, cuya sede estaba en la calle Chinchilla, 7 bajo, tenía dos directores: Leopoldo López de Saá se encargaba de la parte literaria y F. Navarrete y Sierra de la artística.


Rafael Gómez Gallito en 1.897.
No cabe duda alguna de que heredar la profesión de nuestro mayores es una de las mejores herencias. El médico o abogado que hereda la clientela de su antecesor, el comerciante cuya razón social sigue en la plaza con el nombre de sus antepasados, como garantía más completa para el negocio, el industrial, el literato, el cómico y hasta el torero, tienen con la herencia de la profesión, una base de gran solidez para el progreso de sus futuros ejercicios.

En esto se nota, más que en ninguna otra profesión, esta influencia hereditaria. Las figuras más salientes del toreo han heredado las cualidades buenas y hasta los defectos se han visto de relieve en su oficio. De Curro Guillen, descendía Cúchares y Manolo Arjona; de éstos, Currito y Buitrago; Redondo era sobrino de Montes; Lagartijo, hijo del Niño de Dios; el Gordito, hermano de José y Manuel Carmona; el Gallito, hermano de José Gómez, famoso banderillero de Lagartijo, y ¿para qué más? En el barrio de Santa María, de Cádiz, vivió muchos años la señá Gabriela, la cual llevó en su seno una escuela de tauromaquia (según un ingenioso dicho del barrio), pues fue madre de los Lavi, Francisco Ortega (el Cuco), Manuel Ortega (el Lillo), Enrique Ortega, Antonio Ortega (el Marinero) y el célebre José Ponce, y de otros que no lelgaron a brillar en el arte como los ya citados; poderosa razón es esta para que el joven que ligeramente se biografía, y que es nieto de esa señá Gabriela y el mayor de los hijos del célebre matador de toros Fernando Gómez El Gallito así es, que tanto por la línea materna como la paterna, Rafael Gómez decimos, lleve la sangre torera. Desde muy niño, pues apenas contaba siete años, toreaba Rafael de salón de manera magistral, causando la admiración a todos los que acudían a la huerta de su padre a verle ejecutar las más difíciles suertes del toreo, encontrándose en él una gran decisión para torear las reses bravas que encerraba su padre para ejercitarse en los meses de descanso, consiguiendo ejecutar los quiebros con limpieza.

Muchos aficionados, amigos de Fernando que acudieron a verle torear a la huerta y a la plaza que tiene Reverte en Alcalá del Río, aconsejáronle que lo dedicara al arte, resistiéndose aquél bastante, pues todo el que conoce al Gallo sabe la pasión que tiene por sus hijos, por lo que siempre estuvo indeciso, pues su gusto hubiese sido dedicarlo a una carrera donde su vida no tuviese la constante exposición que tiene con los toros. 

Rafael ha recibido de su padre muchas lecciones; de él ha oído explicar el toreo, sistema desconocido en los maestros del arte de Montes, quienes enseñaban únicamente en los momentos de practicarlo; pero Fernando Gómez ha tenido el don de saber muy bien hablar de toros y exponer con gran claridad el modo de ejecutar las suertes con todas las reglas del arte.

En resumen, Rafael Gómez promete ser mucho, cuenta ahora unos dieciséis años, es arrojado como lo justifica su debut en la plaza de Valencia, a pesar de lo impresionado que estaba al torear por vez primera ante un numeroso público; es muy simpático y tiene una buena estatura, ejecuta los cambios con gran soltura y limpieza, su toreo es muy adornado, notándose la tendencia de seguir la escuela sevillana, legítima herencia de su padre, el que sin disputa ha sido en ella uno de sus más notables continuadores y hoy su indiscutible maestro.

domingo, 15 de septiembre de 2013

¿QUIÉN ES GALLITO?

Javier Vellón ha remitido el siguiente texto para su publicación.

¿Quién es Gallito?

Rafael.
Con ese título publicó un artículo de opinión el crítico taurino sevillano Francisco Paniagua, en la revista El Enano (12 de junio de 1910). Desde su gallismo militante, el autor trata, a propósito de la figura de Rafael El Gallo, el tradicional tema sobre los diestros artistas, su valor y su irregularidad.


En una revista taurina publicada o en un periódico de Madrid, se juzgó el trabajo que hizo en aquella plaza  Rafael Gómez (Gallito). 

Se juzgó mal, y apelamos al Tribunal de la lógica. El apasionamiento o lo que quiera que sea, hicieron resaltar los defectos de este torero más que los de ningún otro, acaso porque el relieve de esa figura taurina sea víctima de las mayores simpatías que otros conquisten, y cieguen a los ojos de la razón los que le juzgan, porque no vean más que por el prisma que quieran mirar sus cosas. 
Morante...
Curro...
Casi todos los temas que se plantean en este problema, es la tan odiosa y consabida pregunta ¿por qué no mata Gallito? Como si al sentar tal premisa, fuera como la consecuencia del silogismo, de “Gallito ni mata, ni es torero” 

¿Torea Gallito? Sí. Y torea más y mejor que todos los que escuchan aplausos de esa muchedumbre que se agolpa en las caldeadas gradas de sol, en los lucidos palcos, o en los tendidos de sombra de todos los circos taurinos. 

Aparicio...
La prensa imparcial reconoce que el torero que se discute lo mismo que sus compañeros de arte hace porque la fiesta nacional perdure y viva, en tanto a él resten alientos, y que sus compañeros de él, en tardes menos afortunadas, tuvieron que excusarse la protesta del público, en lo que hay que convenir que todos tienen sus dificultades. 





Las comparaciones son odiosas, pero me atrevo a señalar este punto: Guerrita ha sido el torero más torero de nuestros tiempos y tuvo tardes malas.”Gallito” es el torero más torero de nuestros días y todo lo que no sea admitirlo parece que el juicio que de él se emite lo dicta más que la imparcialidad de un buen criterio, la antipatía que pueda tenerle al diestro, quien le juzga, Rafael es torero por herencia, presencia y potencia. Es hoy la figura taurina que lleva al Coso más público, porque también el público saborea más arte; es el Ultimatum, la última palabra, al fin, del arte del toreo, porque como ninguno sabe manejar a la fiera que sucumbe y se rinde a la destreza, al donaire y al valor con que al flamear su envidiado capote, hace levantar de sus asientos al público que le admira, y en un aplauso unánime, solemne y emocionante se le tributa, una ovación merecida que deja resonar al eco las palmadas que atronaron el espacio. 

Rafael...
A pesar de que todo el público no es inteligente, en una palabra, que no sabe de toros, el problema que se quiere demostrar queda descifrado diciendo: «Que en mucho tiempo ni veremos toreros como el que es objeto de estas líneas; que es un diestro al que con su arte le acompaña esa intuición genial del hombre inteligente que sabe lo que es el peligro, lo mide, lo acomete, lo arrostra, y sabe salir airoso porque en la destreza está la salvaguardia del torero”. 

Y... como ni es un suicida (al saber le llaman cobardía) y sabe que es más noble volver a su hogar devolviendo la alegría que antes se quitara para luchar con lo imposible que llenar de impresiones dolorosas su casa, la afición y cuantos los descontentos piden, no será nunca como otros desgraciados compañeros a los que les indujo a su muerte más que su heroísmo, su ignorancia. 

A la hora suprema está satisfecha la afición que se acerca, hace lo suyo, y en lances apurados donde tenga que jugar su prestigio, se juega la vida como primero. 

«Este es Gallito». 

Y como no es un torero ignorante y el concepto del arte de Montes lo tiene en mucha más estima que los que le atacan, pese a quien pese, el hijo del famoso Fernando es torero, y el torero mejor del día, a pesar de sus detractores.
Tiene la palabra Don Modesto.

miércoles, 21 de agosto de 2013

GALLITO, OREJA ENTRE INCIDENTES EN LA MAGDALENA DE 1.909

Cabecera del Heraldo.
Rafael Gómez, conocido en aquel entonces como Gallito, participó en la corrida de la Magdalena de 1.909 celebrada en Castellón el domingo 21 de marzo. La edición nocturna del Heraldo de Madrid recogía la actuación del diestro madrileño, recién llegado de su periplo mejicano. 

Yáñez, que firma la información, sostiene que “a la hora de empezar la corrida hay en la plaza un lleno completo, reinando gran entusiasmo”.


Abre la tarde, en la que se juegan toros de Anastasio Martín en mano a mano, Bombita. Se enfrenta a Ramito y escucha palmas al pasaportarlo. Gallito lo lancea en quites “con bastante inteligencia”.

El segundo es Bonito, de pelo negro. Rafael “lo lancea abriéndose de capa. Salsoso y Moreno mojan seis veces, recibiendo cuatro batacazos.
Gallito está muy oportuno a los quites, mostrándose trabajador.
Blanquito y el hermano del Gallo clavan tres pares superiores que son aplaudidos.
Coge Rafael los avíos de matar, y pasa al toro desde cerca con valentía.
Deja un pinchazo que el toro escupe, muletea nuevamente, y arrea una estocada pescuecera. Intenta luego el descabello y acierta a la primera”.

Gallito brinda a Bombita.
El tercero atiende por Flor de Jara, salta un capitalista y el Bomba lo libra de una desgracia pero no puede “sustraerle de las garras de la Policía, que se lo lleva detenido por su heroísmo”. Ricardo hace una buena faena que remata con media.

Arropero es colorado y hace cuarto. “Con codicia toma cuatro varas a cambio de tres porrazos y un penco difunto. Fajardo y el Inglés dejan buenos puyazos y reciben tumbos tremendos.
Gallito lancea al toro superiormente, oyendo palmas.
Coge Rafael los palos, y adornándose deja un buen par al cuarteo, que se aplaude.
Limeño y Pinturas colocan dos pares medianillos. 
Gallito, después de un buen trasteo, deja una buena estocada hasta la mano. 
El toro rueda hecho una pelota, y a petición del público que le ovaciona, se concede la oreja al espada”.
El presidente ordena que tuesten al quinto “pero el público lo impide a botellazo limpio. Como la bronca sigue es retirado el cornúpeto al corral, siendo soltado un sobrero, que resulta mansurrón”. Bomba larga una pinchazo a paso de banderillas, dos medias estocadas y descabello.

El sexto es abanto, negro y cornicorto. “Rafael lo lancea bien. El toro toma tres varas, matando un caballo. 
Un capitalista se tira al redondel e intenta clavar un par de banderillas, impidiéndolo Limeño.
Gallito chico y Pinturas colocan tres pares.
Gallito, después de una buena faena, mete el brazo y es acosado.
Muletea de nuevo y deja media delantera. Aprovechando después larga otra media, buena, de la que cae el toro”.

miércoles, 17 de julio de 2013

RAFAEL GÓMEZ GALLO EN 1904

Gallito en 1.904.
El anuario Toros y Toreros en 1904 que escribió Manuel Serrano García-Vao recogía con estas palabras la temporada de Rafael Gómez Gallito:


“Lástima grande que el hijo de Fernando Gómez no sea más matador, aunque fuera menos toreros. 

Verdad es que las temeridades no fueron nunca patrimonio de su familia; pero no lo es menos que su insigne antecesor no tuvo tan descarada prudencia hasta los últimos años de su carrera.

Da pena ver un tan grande torero con tanto... miedo (¿cómo lo vamos a llamar?) cuando tiene que estoquear.

Y es doblemente sensible, porque si hiciera un esfuerzo, aunque fuera muy pequeño, podría taparse y llegar a los primeros puestos, que no tocará nunca si persiste en su modo de ser cuando llega el momento supremo de la lidia.

En lo que respecta a torero hay que descubrirse con respeto cuando el niño pone en práctica todo lo que sabe, y puede afirmarse que de Fuentes abajo puede llamar de tú a todos los que torean bien. La verdad en su lugar.

Pero la historia está llena de ejemplos de buenos toreros que no lograron ganar dinero ni colocarse, a pesar de su ciencia.

En lo que hay más peligro en los toros es en el momento de enterrar el estoque en el morrillo, y por eso el público paga, y conste que el buen juicio de las multitudes supera a todos los buenos juicios habidos y por haber.

Precisamente por eso Frascuelo, Mazzantini y Algabeño, en sus épocas respectivas, gnaron mucho más que otros que eran cien veces mejores toreros que ellos y no se arrimaban al matar.

De seguir Rafael Gómez por el camino emprendido, cada año toreará menos y acabará en punta su historia.

Mírese en el espejo de Faíco, que es uno de los mejores toreros que han existido, que merece tratamiento de Vuecencia, y no ha conseguido hacer la carrera que lograron otros verdaderos trompos.

La temporada última la empezó en Castellón, el 13 de Marzo con Lagartijo, estoqueando Veraguas, y dijeron los que lo vieron que había estado superior en uno y no más que regular en el resto.
Vino a Madrid el 20 de dicho mes con el mismo compañero, quien le confirmó la alternativa, con ganado también del Duque.

Aunque toreó bien, estuvo mal al matar sus tres toros.

Obra consultada.
El 3 de Abril, en Sevilla, mató mal los tres de Otaolaurruchi que le correspondieron, con Bombita chico.

El 17, en Madrid, toreó Villamartas, con Bombita chico y Machaquito, y, sin atenuantes, estuvo mal en los tres.

Toré la feria de Sevilla los días 18, 19 y 20, con Montes y Ricardo la priemra, y con éste y Machaquito las otras dos.

El ganado perteneció a Anastasio Martín, Moreno Santamaría y Miura, y exceptuando unas verónicas que dio en una de las corridas, lo demás fue deficiente con exceso.

Igual suerte tuvo en Barcelona toreando reses de Arribas, con Machaquito, el 24.

A Bilbao fue los días 1º y 2 de Mayo con Bombita chico, toreando reses de Saltillo y Valle. En ambas corridas estuvo bueno toreando, y en la segunda mató bien, sin excederse, dos toros.

Con los Gameros que lidió en Madrid el 8 de Mayo, acompañado de Montes y Saleri, estuvo desgraciado.

Fue a Valencia el 15 de Mayo con Valenciano y Lagartijillo chico, estoqueando medianamente toros de Peñalver y Tabernero.

En Barcelona toreó Miuras con Chicuelo el 22, y en un de ellos quedó bien.

El 29 mató en Madrid reses de Castellones con Algabeño y Machaquito, y esta fue la corrida en que oyó palmas matando en esta Plaza, pues estoqueó el sexto bastante bien.

El 2 de Junio mató en Sevilla con Machaquito tres de Otaolaurruchi, y estuvo muy flojo.

Toreó en Barcelona el 12, pero no llegó a estoquear porque la corrida se suspendió en el segundo, por la mala calidad del ganado.

Le acompañaban Machaco y Chicuelo.

La corrida nocturna de Barcelona, el 23 de Junio, la toreó con Villita y Chicuelo, matando regularmente los Gameros que le correspondieron.

El 24, con Chicuelo, toreó en Vinaroz ganado de Otaolaurruchi, y estuvo deficiente.

Tres de Ripamilán mató en Castellón, el 10 de Junio, con Mazzantini y Chicuelo, regularmente uno y bien el otro.

El 25, 26 y 27 toreró en Valencia toros de Hernández, Miura y Pablo Romero, con Fuentes y Ricardo las tres, y con Don Luis, además, la última.

Solo mató bien uno de Hernández, y en los otros no pasó de regular.

Los días 14 y 15 de Agosto toreó en Badajoz toros de Saltillo y Félix Gómez, con Montes las dos tardes, y con Lagartijillo chico, además, la segunda. No pasó de regular.

El 21, en San Sebastián, con Lagartijo y Machaquito lidió Cámaras y, sin hacer grandes cosas, cumplió bien.

El 28 de Agosto, en Málaga, con Lagartijillo chico, mató tres toros de Pablo Romero, y cumplió bastante bien.

En Requena toreó el 18 de Septiembre con Valenciano toros de Félix Gómez, y estuvo mal.

Con Lagartijo, Machaquito y chicuelo mató, el 24, en Barcelona, toros de Surga, quedando superior en su primero y muy deficiente en el otro.

A Nimes fue el 25 y, con Lagartijo, despachó una corrida de Otaolaurruchi, quedando aceptablemente.

Y acabó la temporada el 2 de Octubre en Bezieres, matando regularmente, con Fuentes y Montes, una corrida de D. Esteban Hernández.

Esta es la campaña que ha hecho el hijo del célebre Gallo, tomando parte como matador en 30 corridas y estoqueando 72 toros.

Pudiera ser que si el año próximo empieza como empezó éste, toree muchas menos".

domingo, 3 de marzo de 2013

ACCIDENTADA CORRIDA DE MAGDALENA EN 1.903

Cartel de la corrida.

El domingo 22 de marzo de 1903 la plaza de toros de Castellón abrió sus puertas para celebrar la tradicional corrida de la Magdalena.  El cartel estaba formado por toros de Peñalver para Antonio Fuentes y Rafael Gómez “Gallito”. Tarde controvertida por el equívoco generado al cederle Antonio los trastos a Rafael, que muchos interpretaron erróneamente como la alternativa, y de lío gordo en los tendidos y fuera de ellos...

Por la mañana

El Liberal relata la expectación previa: 

“Hay gran animación con motivo de la feria. 
De madrugada llegaron las cuadrillas de Fuentes y el Gallito. 
Los trenes de Valencia han traído cinco mil personas. Cerca de cuatro mil han venido de los pueblos de la Plana y del Maestrazgo.
Toda esta gente ha animado mucho las calles de Castellón, haciéndose imposible el tránsito por muchas de ellas.
La feria ha estado concurridísima por la mañana, hablándose con entusiasmo de la corrida y de la función de teatro de la noche, para la cual estaban agotadas las localidades en el despacho, ofreciéndose a precios bien altos por los revendedores”.

El Globo refiere igual cifra de visitantes, pero difiere en cuanto a la  procedencia: “llegaron esta mañana más de 9.000 forasteros en los trenes especiales de Valencia y Cataluña”.

La corrida
Gallito toreó la Magdalena de 1.903.

Lleno en sol, tres cuartas partes en sombra y luce Lorenzo. Brillante el desfile, escuchando palmas de bienvenida las cuadrillas.

Los toros de Basilio Peñalver aguantan 28 puyazos, derriban en diez ocasiones y dejan cinco jacos para el arrastre. “La presidencia descuidada y el servicio de plaza malo” en opinión de El Liberal.

El Toreo, en su edición del 6 de abril, pormenoriza sobre la corrida: 

El primero es pequeño, bien puesto de cuerna. Tomó, acudiendo pronto, pero sin poder, seis pinchazos, entre puyazos y refilones, matando dos caballos. Los chicos de Fuentes ceden los palos a los de Gallito; Rodas, de frente, prende un gran par, cuadrando en la cabeza. (Aplausos). Braulio Martínez cuarteó un buen par y repitió Rodas con otro de primera.
(Palmas a los dos).
Antonio Fuentes alternó con Rafael.
Fuentes cede los trastos a Rafael Gómez, y éste, que va de rojo y oro, equivoca la faena, pasando por bajo al bicho, que tiene la cabeza por el suelo. Fuentes le vuelve el toro, levantando el capote. Después de media bien puesta, atizó Gallito una estocada delantera que bastó. 
(Algunas palmas.) 

Segundo.—Negro, pequeñito como el otro; tomó 
siete puyazos; en los quites muy bien Gallito. Repetida la ceremonia por los chicos de éste, Roura cuarteó un buen par, cayendo a la salida, sin que el toro se fijara en él; Cuco metió un palo, y repitió Malagueño con un par bien puesto. 
Gallito cedió a Fuentes los trastos, y éste, de café y oro, comenzó con un pase natural y otro ayudado muy buenos. Parando mucho siguió la faena con pases en redondo, ayudados y con la derecha. Entrando bien, agarró una estocada hasta el puño muy buena, que bastó. 
(Muchas palmas ) 

Tercero.—Bizco y astillado del izquierdo. 
Sufrió cinco picotazos, por cuatro tumbos y dos caballos muertes. Los banderilleros cumplieron bastante mal su cometido, y Fuentes lo pasó con ambas manos, bailando algo, pues el torete se comía la muleta, y metió una estocada superior, entrando muy bien. 
(Ovación.) 

Cuarto-Negro, bien puesto. Tomó seis puyazos mansurroneando. Entre Pepín y Africano pusieron tres pares buenos. Gallito pasó sin parar y arreó una ladeada, entrando con los terrenos cambiados y estirando el brazo. 

Espectadores en Castellón a principios del siglo XX.
Quinto—Berrendo en colorao, recogido de cuerna. Con bravura tomó cuatro puyazos de Cachiporra, que apretó bien y oyó palmas. En los quites muy aplaudidos los maestros. Cambiado el tercio, tomaron los palos, y Gallito cuarteó un buen par, cambiando el viaje. Fuentes, después de intentar el cambio, puso un buen par, y acabó Rafael con otro bueno, cambiándose de lado en él viaje. (Muchas palmas A los dos.) Fuentes pasó parando y cogió un buen volapié. 

Sexto.—Berrendo en coloran, abierto de cuerna. 
Tomó seis puyazos, y murió a manos de Gallito de una estocada buena, después de algunos pases con ambas manos. 

El Toreo emite el siguiente juicio sobre la actuación de Rafael:

“Gallito continúa siendo con el estoque el mismo matador inseguro y desconfiado que antes de pasar el charco. 
Con el capote lució su toreo adornado y juguetón, variado y alegre, en largas, verónicas, faroles, navarras, todo ello modernista, nuevo, con su estilo propio y de nadie imitado. Su faena en esto fue una verdadera filigrana. Su edad y sus nervios producen su toreo. Por eso con la muleta, cuando el diestro debe mover menos los pies y atender más a la utilidad que al lucimiento, cuando la percalina del capotillo deja de ser juguete y adorno y se convierte en la muleta, defensa y ayuda del matador, que trata de facilitar el último trance quitando defectos, resabios, querencias, cuando eso ocurre, la figura del Gallito decrece y se achica, hasta anularse completamente cuando la punta del estoque mira al morrillo de la res y la franela queda liada al palo”. 

Incidentes

Durante el arrastre del quinto unos tenientes del regimiento de Otumba que ocupaban un palco provocaron un escándalo. Cuando parecía aplacado el jaleo, cayó sobre los espectadores una lluvia de botellas y de sillas.  Parece ser que uno de los ocupantes le dio un garrotazo a un espectador del tendido. 

El público, enarbolando los bastones, tomó por asalto el palco y la emprendió a silletazos con los promovedores de la gresca, y acabó la cosa retirándose éstos con algún hueso resentido, después de un minuto de lucha. Antes, los militares continuaron arrojando objetos entre un estruendoso griterío y el desmayó de muchas señoras. Los tenientes huyeron de la plaza, siendo arrestados momentos después. Personados en el lugar de los hechos efectivos de la Guardia Civil comprobaron que había varios heridos y contusionados. 

El estanque de Ribalta también sirvió de refugio.
El gentío que esperaba pacíficamente en el parque Ribalta la salida de los toros, como es costumbre en Castellón, creyó que un toro había saltado al tendido y que estaba a punto de irrumpir en la vía pública. Todo el mundo quiso ponerse a salvo corriendo alocadamente en busca de un lugar seguro. Los unos entraron a toda prisa en las casas donde encontraban la puerta abierta, otros se encaramaron a las tribunas de la música y la plataforma del Obelisco que preside el parque, los más ágiles treparon árbol arriba y alguno, presa del pánico, se lanzó de cabeza al estanque.


Tal fue el lío montado que, cuando se aclaró, se pensó organizar una manifestación de protesta por lo ocurrido.

Antigua estación de Castellón.
La violencia no terminó ahí y continuó en el tren que llevó hasta su destino a los aficionados valencianos. En los especiales fletados al efecto, que partieron alrededor de las nueve de la noche, se cantó La Marsellesa y se dieron vivas a Blasco Ibáñez y a Fernando Gasset. Al pasar por Villarreal, pueblo eminentemente carlista y católico, algunos de los ocupantes, fervientes republicanos, dispararon varios tiros sin que la cosa fuera a mayores.