Mostrando entradas con la etiqueta Rafael Ortega Gomez. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Rafael Ortega Gomez. Mostrar todas las entradas

miércoles, 4 de mayo de 2016

RAFAEL ORTEGA 'GALLITO' EN LA INAUGURACIÓN DE LA TEMPORADA CORDOBESA DE 1.939

Cartel inaugural de la temporada.
El domingo 19 de marzo de 1.939 Córdoba inauguraba temporada con una novillada en la que participó Rafael Ortega Gómez 'Gallito', compartiendo cartel con Manolete y el bilbaíno Luis Díez en la lidia de reses de Carmen de Federico. El festejo, nada brillante por cierto, tiene su pequeño rinconcito en la historia de la Tauromaquia por ser en el que se presentó el pasodoble dedicado a Manolete, obra de Pedro Orozco González y José Ramos Celares, e interpretado por la Banda Municipal de Córdoba.

Los beneficios de la novillada fueron para sufragar el trono procesional del Señor de la Caridad, hermandad que por aquellos días se había fundado en la parroquia de San Francisco y San Eulogio. 

La Hoja Oficial del Lunes publicada en Granada dio una pequeña reseña sobre el espectáculo. De Gallito dice que “estuvo en su primero voluntarioso con la capa y artístico con la muleta. Matando, breve. En su segundo lució con el capote e hizo cosas de buen torero. Hábil matando. El quite de la tarde lo hizo Gallito en el tercero de la corrida, que fue el primero de Luis Díez”.

Manolete “en el segundo estuvo valiente y mató bien. Fue ovacionado. En el quinto lanceó artístico, hizo buenos quites, muleteó bien y mató lo mismo. El público pidió la oreja que el presidente no concedió”.

El vasco Díez fue enjuiciado en los siguientes términos “estuvo valiente en los dos suyos, pero también estuvo desafortunado. La suerte le fue adversa y sus buenos deseos no tuvieron realidad”.

miércoles, 2 de marzo de 2016

ENFADO DEL DIVINO CALVO

Rafael El Gallo.
Cuenta Rafael Ortega Gómez 'Gallito' en su libro 'Mi paso por el toreo' un anécdota protagonizada por el genial Rafael El Gallo:

"Mi tío, al contrario que su hermano José, de genio más fuerte y acusado, casi nunca se enfadaba; pocas veces le vi hacerlo. Pero una vez estábamos comiendo en nuestra casa de Sevilla y un señor por la radio, en un programa de toros, comenzó a poner a Guerrita como un trapo. Se volvió hacia el aparato y frunciendo el entrecejo dijo:

- Este mamarracho quiere hacer una historia del toreo nueva para él.

Y dejando la comida a medias, se levantó de la mesa y se encerró en su habitación".

miércoles, 10 de diciembre de 2014

RAFAEL EL GALLO, EL FILÓSOFO DEL TOREO

Rafael y Juan.
Javier Vellón envía el siguiente texto para su publicación.


Con motivo del centenario del nacimiento de Rafael ‘el Gallo’, su sobrino Rafael Ortega publicó el siguiente artículo en el Suplemento Taurino Semanal de Diario 16. Fue en el número 18, la semana del 9 al 15 de noviembre de 1982.

"Me piden que haga una semblanza de este torero sin par que fue Rafael el Gallo. No quiero que piensen algunos que soy parcial en mis juicios por el parentesco que me une, pero quien me conoce sabe que he elogiado siempre a los grandes toreros.

Rafael original.
Yo, que tuve la suerte de hablar cientos de veces con este hombre genial, que decía que los toros tenían ‘química’, esto la gente no lo entendía porque taurinamente estaba a años luz de los demás como torero y como aficionado. Pasado el tiempo comprendí que todo lo que decía tenía una lógica aplastante; conocía el toro como nadie, solo con verlo sabía de sus condiciones: un privilegio de toda mi dinastía.

Fue el torero de los toreros. En mis conversaciones con ‘Guerrita’ me dijo que Rafael el Gallo era quien había toreado mejor en la historia del toreo. Al comentarlo con ‘Machaquito’, levantándose de la silla en un gesto emocionado, me confesó: “Eso lo corroboro yo también”.

A mi llegada a México el primer viaje que hice a ese país, en una conversación que sostuve con Rodolfo Gaona, le pregunté que quién era el mejor torero que él había visto, y esta fue textualmente su respuesta: “Tú esperarás que te diga que fue tu tío José, y en verdad lo fue por todas sus extraordinarias condiciones, pero quien ha toreado mejor de todos los toreros ha sido Rafael el Gallo”.

El sobrino Rafael.
Yo conocía la gran predilección que sentía Juan Belmonte por mi tío. Un día le pregunté: “Dígame, Juan, ¿qué clase de torero fue Rafael el Gallo?”. La respuesta de Belmonte fue rotunda: “Tu tío Rafael ha sido el inventor del toreo. Te lo voy a explicar: dicen que Lagartijo fue un  fenómeno; Guerrita fue un torero largo y poderoso. A los demás ya los vi y no me lo tuvo que contar nadie. Rafael el inventó el toreo moderno, porque tú sabes que en aquella época se dedicaban más a lidiar a lo toros que a torearlos. Cuando Joselito y yo llegamos al toreo ya lo había inventado él que, además, ha sido el que mejor ha toreado en la historia del toreo”.
Por todo lo expuesto, no por mí, sino por las máximas figuras de todos los tiempos, estoy seguro de que la personalidad de mi tío Rafael el Gallo es la más rica de los anales del toreo".




miércoles, 30 de julio de 2014

GRAVE CORNADA DE JOSÉ ORTEGA GÓMEZ "GALLITO CHICO" EN MIRAFLORES

José Ortega, Jesús Tordesillas,
Rafael Ortega y Cristóbal Becerra en
los prolegómenos del festejo.
José Ortega Gómez, que se anunciaba Gallito Chico, fue sobrino de Rafael y Joselito, hijo del subalterno Enrique Ortega El Cuco y de Gabriela, hermana de los Gallo, y hermano del matador de toros Rafael Ortega Gallito, de Gabriela y de Trini.



El José que nos ocupa nació en la sevillana Alcalá de Guadaira el 26 de septiembre de 1.923. En 1942 triunfa en Barcelona y a la temporada siguiente debuta en Madrid. Dos años después, el 19 de agosto de 1945 sufre una gravísima cornada toreando un festival con Félix Colomo y su hermano en Miraflores de la Sierra que lo retira temporalmente del toreo. Tras espaciar sus actuaciones se decide a cambiar el oro por la plata y se enrola en las cuadrillas de su hermano y en las de Rafael Mariscal, Juan Posada, Alfredo Leal, Manuel Carta, Pedro Martínez Pedrés, Jaime Ostos y Antonio Chenel Antoñete.

El Ruedo, con el apoyo visual del fotógrafo Baldomero, relata así el percance:

Rafael Ortega, José Ortega y Félix Colomo antes de
hacer el paseíllo.
"El domingo fueron muchos madrileños a Miraflores de la Sierra. Muchos artistas y muchos aficionados, que prefirieron ver un festival en aquel pueblo serrano a presenciar la poco atrayente novillada que se anunciaba en la Monumental. En un coche, conducido por Armando Calvo, salieron para Miraflores Pepe Nieto, su señora y Asunción, hermana de Imperio Argentina. En otro, que guiaba Rafael Ortega, Imperio Argentina, una amiga de ésta, Gabriela Ortega, hermana de Rafael y de José y Cristóbal Becerra (su apoderado).

Se iban a lidiar tres novillos de la ganadería del señor González, de Miraflores de la Sierra, y nadie creía que allí pudiera ocurrir nada importanten en ningún terreno. Era, en definitiva -se pensaba-, una tarde pasada agradablemente en un pueblecito simpático.

Y a torear fueron los hermanos Gallito con Félix Colomo. No se daba importancia alguna al ganado, y Jesús Tordesillas decidió tomar parte en el festejo taurino como peón.

Madrileños en el festival de Miraflores. Entre otros,
Imperio Argentina, su hermana, Gabriela Ortega,
la esposa de Pepe Nieto, Armando Calvo,
Faustino Bretaño y Pepe Nieto.
Nada notable ocurrió en el primer bicho. Colomo toreó y mató bien, y cuando se iba a dar suelta al segundo novillo, que había de torear Rafael Ortega, los encargados de los chiqueros se equivocaron y salió a la plaza el que debió correrse en tercer lugar. José Ortega tomó su papel muy en serio y decidió correr el turno y torear él el novillo que le había correspondido. José veroniqueó muy bien, tan bien, que los espectadores le ovacionaron y hubo de saludar gorrilla en mano. Era bravo el novillo, y por ello, Rafael y José decidieron banderillearle. Un par de Rafael; los dos hermanos corren al novillo y juguetean con él; otro par de José; nuevos adornos de los dos hermanos; un tercer par de Rafael, y la ovación , la ovación que animó al más pequeño de los hermanos Gallito a pedir permiso para colocar otro par. José salió comprometido del trance y tuvo necesidad de refugiarse en una talanquera. Al volver la cara hacia el novillo, éste le prendió y materialmente le clavó en las tablas. Nadie creía que aquello pudiera tener importancia. Le llevaron a una habitación del Ayuntamiento, y allí el doctor Merlo procedió a taponarle la herida. La cogida había sido grave, gravísima. Inmediatamente se decidió trasladar al herido a Madrid.

Rafael visita a su hermano.
Armando Calvo al volante del coche en el que José Ortega era conducido hacia el Sanatorio de Toreros. Con el herido, la hermana de Imperio Argentina y Becerra. Al lado del conductor, Rafael Ortega. Detrás, otro coche que conducía Pepe Nieto, y en el que iban su esposa, Imperio Argentina, una amiga de ésta, Gabriela Ortega y Jesús Tordesillas.

Al llegar a Colmenar fue necesario parar los coches y dar un descanso al herido, que había sufrido vómitos y un desvanecimiento. Después, todo lo rpápidamente que fue posible, se dirigieron a Madrid.

José Ortega en el Sanatorio de Toreros.
A las nueve de la noche, Gallito Chico era examinado en el Santaorio de Toreros por los doctores don Máximo García de la Torre y don Enrique Castillo. Una rápida consulta. Había dos peligros. Fue salvado el de la muerte inminente y se procedió a la ligadura de la arteria femoral. La operación era arriesgad. Los médicos había apreciado una gran contusión en la femoral y vieron cómo los coágulos de sangre evitaban el riego de la pierna dercha. Redactaron este parte facultativo:

“En el día de la fecha, y a las nueve horas de la tarde, ha ingresado en este Sanatorio, procedente de Miraflores de la Sierra, el novillero José Ortega, Gallito Chico, con herida por hasta de toro en el triángulo de scarpa del lado derecho que interesa piel, tejido celular subcutáneo.

Gallito Chico se quejaba de su mala suerte, demostrada en el cambio de novillo en los chiqueros, y en su obstinación en poner el cuarto par.

Rafael Ortega banderilleando al novillo que hirió
gravemente a su hermano.
La primera noche Gallito Chico la pasó relativamente tranquilo. Al día siguiente aumentaron los dolores y aumentó también la esperanza. Comenzaba a haber riego sanguíneo en la pierna derecha. Durante todo el día del martes la mejoría fue en aumento.

Todo hay que esperarlo de la fuerte constitución de José Ortega, de su juventud, de la pericia de los médicos que le asisten y de las plegaria que Gabriela y aquellas otras mujeres que presenciaron la corrida elevarán a lo alto para que Gallito Chico vuelva a los ruedos con nuevos bríos y renovada afición".

miércoles, 29 de mayo de 2013

DOS PINTORES Y CINCO CARTAS

Los naipes han estado muy ligados al ocio español. Como los toros. Inevitablemente ambas facetas habían de encontrarse algún día y muchos pintores cedieron sus obras para ilustrar las barajas Los Gallo, como principales protagonistas de una época, cobran relevancia en las mismas. 

En esta ocasión nos centramos en dos autores sevillanos separados por el tiempo, Andrés Martínez de León y Pedro Escacena y en cinco naipes de sus respectivas barajas en los que recrean las figuras, ¡cómo no!, de Rafael y José, pero también la de su sobrino Rafael Ortega “Gallito”, que tantas ilusiones despertó entre los aficionados nostálgicos de los cuarenta.

Martínez de León y Oselito.
Andrés Martínez de Le
ón (Coria del Río, el 5 de abril de 1895 – Madrid, 25 de mayo de 1978), fue un reconocido pintor e ilustrador que aprendió a manejar los pinceles en la Escuela de Artes y Oficios de Sevilla. La cerámica radicada en el barrio de Triana fue su primer trabajo como decorador. Dicen que su personaje Oselito, nacido en 1918, reproduce la manera de ser del gran Joselito y de él publica varios libros.











José.
Rafael.
Rafael Ortega "Gallito"
La baraja que firma es de póker, data del año 1.951 y la publicó la reconocida empresa Heraclio Fournier. Consta de 52 naipes y dos comodines. Aparece Rafael con una silla en la izquierda, la muleta en la derecha, dando la espalda al toro, como desdeñando el peligro. En el suelo un sombrero, señal inequívoca de éxito, lanzado por algún partidario. José luce su poderío en un pase a medio camino entre el ayudado y el kikirikí, apoyando en la arena las puntas de los pies. Su sobrino Rafael está rematando un muletazo sentado en la silla, en claro guiñó a su tío, el Divino Calvo. 















Pedro Escacena.

Pedro Escacena Barea nace en el barrio de la Macarena de Sevilla el 19 de noviembre de 1.931.Nieto del novillero José Escacena, tras vestirse de luces en varias ocasiones cursa estudios artísticos en la Escuela de Artes y Oficios de Sevilla. De sus pinceles han salido cuadros de numerosas figuras del toreo. Su Rafael está ejecutando el pase de la silla, al que le imprimió sello personal. Joselito, en cambio, remata un kikirikí. Ambas imágenes corresponden a la baraja Grandes Toreros de la Historia, publicada por la misma casa vitoriana antes mencionada en 2.001. También es de póker y consta de 52 cartas y tres jokers.





Rafael.
José.

domingo, 17 de marzo de 2013

RAFAEL ORTEGA GÓMEZ BIOGRAFIADO POR CURRO MELOJA


Curro Meloja

Carlos de Larra y Gullón, pariente de Mariano José Larra, escribió crónicas taurinas con el seudónimo de Curro Meloja. En 1.945 publica su Álbum Biográfico Taurino al que nos referimos en el presente artículo.

Curro comenzó en el Heraldo de Madrid y en el semanario Los Domingos. Además fue taquígrafo del Senado, autor de teatro y radió sus crónicas en Radio Madrid. En la década de los años treinta polemiza sobre el afeitado. Murió en 1.962. 

El álbum lo lanzó ediciones Larrisal y consistió en más de un centenar de postales de diestros de distintas época, en muchas de las cuales se reproducía su firma. En el reverso venía la biografía de Meloja sobre el protagonista. El que nos ocupa es Rafael Ortega Gómez "Gallito", sobrino de Rafael y José que llegó a ser matador de toros.



Rafael Ortega "Gallito" en el
Álbum Biográfico Taurino.


"Un polluelo más del gran "gallinero" taurino; astilla de ese palo tan torero es este Rafaelito Ortega, hijo del "Cuco", que era primo carnal, cuñado y banderillero de "Joselito", y de una hermana de éste; biznieto, nieto, sobrino, hermano y primo de los innumerables "Gallos" y "Gallitos" que en el mundo han sido, el chavea, desde que oyó decir que el mundo era redondo, creyó indudablemente, que el mundo no era otro que el redondel de las plazas de toros, y en cuanto dio sus primeros pasos no pensó más que en dar la vuelta al mundo -para él, el ruedo- emulando las glorias de sus antecesores. Muy niño todavía, casi un bebé, comenzó a torear en encerronas y tientas, mostrándose desde entonces tal como había de ser siempre: torerito de gran estilo con capa y muleta y francamente malo con la "espá", que, al fin y al cabo, lleva en sus venas la sangre del abuelo, el señor Fernando, y la del tito Rafael. Ya en serio y más crecidito, toreó alguna modesta novillada en 1.936, pero la Guerra de Liberación suspendió sus actividades taurómacas en absoluto. Y cuando terminó la contienda, el nuevo "Gallito" comenzó en serio a darse a conocer como novillero interesando a las gentes aficionadas por su aire torero familiar y la repajolera gracia gitana de su casta, que muchos pretendían ver rediviva en su persona. Y con ese prestigio atávico, debutó en Madrid el 23 de julio de 1.939. Al siguiente año, tras una lucidísima campaña novilleril, tomó la alternativa en Barcelona el 22 de septiembre, de manos de Marcial Lalanda, que le cedió un toro de Sánchez Fabrés. Formaron el cuarteto del cartel Domingo Ortega y Pepe "Bienvenida". El 6 de octubre del mismo 1.940 le confirmó el doctorado en Madrid el padrino de Barcelona, siendo los otros espadas "Curro Caro" y Juanito Belmonte. Toros, de don Antonio Pérez, de San Fernando. Y ya con su categoría de matador, Rafael se fue mostrando como excelente artista aunque -¡ay!- con irritantes desigualdades, porque a quien se asemeja este "Gallito" es al "Divino Calvo". ¡Lástima que no le hubiera dado por parecerse a su otro tío, el fenómeno de la casa, "Joselito, el Inmenso"...! En 1.941 logró torear más de cuarenta corridas, en las que hubo de todo -palmas y pitos-. y cerca de cuarenta en 1.942. Y en 1.943 dio un bajón considerable, del que no ha conseguido remontarse. En el invierno de 1.944-45,"Gallito" fue uno de los toreros españoles que estuvieron en Méjico, donde parece que realizó una lucida campaña. Y ya muy adelantada la temporada actual, regresó a la Patria, sin que sus éxitos ultramarinos se hayan reflejado aquí en un mayo número de contratos. A pesar de todo, como Rafael tiene su onza de oro -su arte- no sería sorprendente que la cambiara cualquier día y armase un alboroto tauromáquico. El mozo, que nació en Sevilla el 22 de enero de 1.917, es de raza calé. ¿Quién ata cabos con un gitano...?

domingo, 17 de febrero de 2013

UN GALLO ENTRE NAZIS

Cartel con la simbología
nazi.

Javier Vellón ha elaborado el siguiente texto sobre la visita de Himmler a España y la corrida que presenció en la que intervino Rafael Ortega "Gallito".



Himmler con Gallito
El 20 de octubre de 1940 se celebró una corrida de toros en las Ventas que ha pasado a la historia por varios motivos, algunos de índole taurina, otros por tener como protagonistas a uno de los principales jerarcas de la Alemania nazi, Heinrich Himmler.
El Reichsführer había venido a España para tratar con el régimen franquista algunos asuntos relacionados con la guerra y para preparar el encuentro entre Franco y Hitler.
Aquel domingo de octubre fue invitado a los toros para presenciar uno de los mejores carteles del momento: Pepe Luis Vázquez confirmaba la alternativa de manos de Marcial Lalanda, con Rafael Ortega como testigo.
El invitado saluda a la concurrencia.
Rafael Ortega Gómez, también apodado durante mucho tiempo ‘Gallito’, era hijo del banderillero Enrique Ortega ‘El Cuco’ y de Gabriela Gómez Ortega, hermana de Joselito y de Rafael ‘El Gallo’. Era su cuarta corrida como matador, desde su alternativa el 22 de septiembre de 1940 en Barcelona con Marcial Lalanda como padrino. Su confirmación se había cumplimentado dos semanas antes.
El festejo fue accidentado pero triunfal en sus resultados. Solo se lidiaron tres toros –de la ganadería de Bernardo Escudero; los de Arranz se quedaron en los chiqueros-, pues la lluvia torrencial caída durante la lidia del tercer ejemplar, a manos de Rafael Ortega, hizo imposible su continuación.
Precisamente en ese toro el heredero de la familia Gallo se consagró como figura y obtuvo lo que las crónicas de la época denominaron “la oreja de la lluvia” (“oreja clamorosa” la definió el crítico de ABC). En sus memorias reconoce que fue una corrida “de muy grato recuerdo para mí”.
Imagen del palco.
Sus compañeros también obtuvieron un notable triunfo: Marcial Lalanda paseó una oreja y el maestro de San Bernardo dio una vuelta tras una gran petición.
A partir de aquí, lo sucedido entra en el anecdotario de la historia. Himmler invitó a los tres diestros a subir al palco –le habían brindado sus respectivos toros- para agasajarlos. Les regaló una pitillera de plata y una medalla nazi. Uno de los subalternos le preguntó a Marcial Lalanda su parecer sobre el obsequio:

-Está bien, pero donde se pongan dos orejas y salir a hombros por la puerta grande…¡las medallas para la Virgen1- respondió el maestro madrileño.

Más impactante fue la conversación entre Pepe Luis y el jefe de las SS. El diestro le preguntó si le había gustado el espectáculo, y Himmler le contestó que no había podido soportar la crueldad de la fiesta. Curiosas palabras de uno de los grandes genocidas de la historia.