miércoles, 27 de septiembre de 2023

CONFERENCIA SOBRE JOSELITO EN MÁLAGA

El Club Taurino Malagueño publicó en 1959 un folleto en el que recoge la conferencia pronunciada por Manuel Molina Peña, su presidente, en los locales de la entidad coincidiendo con el 39º aniversario de la muerte de Joselito en Talavera. 


La obra, titulada 'Recuerdos de Joselito, figura cumbre de la época de oro de nuestra sin par fiesta nacional', se centra en repasar de manera somera, dada la limitación de tiempo de este tipo de alocuciones, la biografía del Coloso de Gelves de forma amena y con un lenguaje dinámico a lo largo de sus 28 páginas. 
 


domingo, 24 de septiembre de 2023

VISITA AL MAUSOLEO DE JOSELITO

'No vengo a visitar muertos sino a recordar su historia'. Así reza el lema de 'Territorio Necrópolis', canal de YouTube en el que Loren Pinel recorre los cementerios de España para dar a conocer a las nuevas generaciones a los personajes más relevantes de hace unos años.

En una de sus últimas entradas ha visitado el de San Fernando de Sevilla, además de otras localizaciones muy ligadas al a figura de Joselito. El vídeo repasa en apenas 9 minutos los momentos más importantes de la vida del Rey de los Toreros. Este es el enlace:

https://youtu.be/HMDDX75LW4I

miércoles, 20 de septiembre de 2023

UN ÉXITO DE RAFAEL DEL AÑO 12 CONTADO POR 'DON PÍO'

Alejandro Pérez Lugín, más conocido como Don Pío, publico en La Tribuna el siguiente artículo en 1912:

¡KIKIRIKÍ!

Sevilla.- Café Royal.- El gallinero


Anoche, cuando el café Fornos se estremecía de entusiasmo y los aplausos al héroe Gallito, TORERO ARTISTA, que se hallaba en el famoso Congresillo, se repetían incesantes, alguien me dijo:

- Mañana se explayará usted cantando a Gallito...

- ¡Digo!...

Y ahora me encuentro con que no sé qué decir. He sido gallista desde el primer día que, de novillero, vi torear al hijo de su padre, que también me gustaba mucho. He defendido a Gallito y he proclamado a los cuarenta mil vientos mi gallismo, cuando era un atrevimiento inaudito, un pecado mortal, cuya remisión ni al mismo Papa de Roma era permitida, ir contra las definiciones que al Consejo general del trust, monopolizador del toreo, se le ocurría lanzar. 

- ¿Habéis visto qué tío más gracioso? -decían, despectivamente, en el Lyon, y en el Gato, y en la Codorniz sencilla, baile de sociedad para costureras y pollos sin graduación-. ¿Pues no se atreve a dudar de Bombita y a defender a Gallito?
Don Pío

Entonces, yo, que he dado nombre a algunas cosas malas y buenas de este torero -yo fui quien bautizó las 'espantás'-, definí a Gallito.

El torero artista

¡Jesús, María y José, cómo se pusieron conmigo!

- Ese lo que quiere es llamar la atención con posturas inverosímiles, absurdas.

- Lo mejor es no ocuparse de él, no nombrarle.

- Sí, sí. Que trabaje en silencio... Don Modesto, ¿por qué le cita usted?

- Pero hombre, si es amigo mío...

- Nada, nada. No hay que citarle. 

¿Y qué? Contra la verdad no puede nadie. Un día y otro se le podrá ocultar a las gentes, pero llega siempre el momento en que se impone, y sus rayos gloriosos iluminan a todos.

¿Y ahora, qué? ¡Hay alguien capaz de poner en dida nada de cuanto yo vine afirmando, a propósito de Gallito y su categoría, un día y otro y otro en artículos y en conversaciones y en aquel Libro de Gallito, en el que puse a mi firma el aval de las autorizadísimas de Guerrita y Fuentes?

- Gallito es la estética del toreo -dijo Antonio.

- Es un asombro -dijo, a su vez, Guerrita-. Hay que quitarse el sombrero. Yo soy un aficionado viejo y me he puesto en pie viéndole torear...

Y anoche, en el andén del Mediodía, cuando los toreros y aficionados, fueron a despedir al César, quisieron describirle, todavía emocionados, la faena que acababa de ejecutar el torero artista ante el asombro de 13.000 espectadores, que declararon, ebrios de entusiasmo, no haber visto nunca cosa semejante. Guerrita, que no ha hecho en Madrid ninguna de las frases que se le han atribuido, dijo estas palabras:

- No me digáis 'na', porque yo sé muy bien de lo que es capaz ese torerazo...

Pero ¿cómo fue esa faena de la que por las pícaras necesidades del ajuste, que obligaron a reducirla a breves líneas en la imprenta, apenas tuvieron noticias nuestros lectores?

- ¿Han visto ustedes -me decía anoche un buen aficionado- que cuando Gallito hace una gran faena de éstas no hay modo de saber cómo fue? "Hizo una faena magistra", escribe uno de ustedes. "Dio una serie de pases artísticos, emocionantes", pone otro, "Aquello fue indescriptible", dice el de más allá.

Cierto, ¿Pero aunque se pudiesen enumerar todos los pases de una de estas faenas, tendremos con esto la descripción, siquiera noticia detallada, de la labor del que Don Modesto -Don Modesto, que fue el primero que me salió al paso cuando yo le llamé a Gallito el torero artista...-llama hoy "el gran artista del toreo"?

¿Qué saca con decir de esta faena que los aficionados recordaremos de por vida y comentaremos muchas veces hasta en la mismísima gloria, adonde iremos derechitos , en gracia a lo mucho que hemos sufrido otras tardes en los toros, que Gallito la comenzó con un cambio y la continuó luego con un pase por alto, otro ayudado por bajo, uno natural estupendo -sencillamente- el mejor pase natural que se ha visto-. otro ayudado, otro natural magno, dos de molinete divinos y tres con cambio por la espalda?...

Pero ¿y la gracia, y la gentileza, y el garbo, y la elegancia, y el clasicismo, y el arte con que todo ello fue ejecutado?

¿Qué pluma pinturera, entusiasta e impresionable es capaz de describirlo?

¿Dónde se encontrarán adjetivos con toda la enorme fuerza de expresión necesaria para elogiar esta labor emocionante, inspirada, genial... "única"?

Es Gallito un artista excepcional, grande hasta en sus fracasos, que, precisamente por ser él quien es, los tiene; no por medroso ni por apático, sino como sombra que acusa y evidencia el mérito incuestionable de su arte.

En Gallito se juntan, en feliz e inverosímil consorcio, el más puro clasicismo y el romanticismo más apasionado. Una veces es cualquiera de los grandes maestros en que aprendió: Lagartijo, Guerrita, su padre, y otras es él, él solo.

Gallito repentiza, inventa en la cara del toro, y de ahí todos esos pases indescriptibles, que sólo se ven una vez: esos movimientos del capote, que sorprenden y encantan y no tienen clasificación ni nombre posible.

- Gallito lo fía todo a la inspiración del momento -me dijo también Guerrita cuando me habló de él.

Con los demás va usted a golpe contado, ya sabe lo que va a ver; con éste no; siempre tiene usted una sorpresa. 

Ayer fueron una serie de ellas las que nos regaló Gallito. Hasta en los lances usuales puso una salsa de gitanería y de gracia que los hizo completamente nuevos.

Velázquez y Goya a un tiempo; Víctor Hugo y Chateaubriand, Zorrilla..., y todo el mágico Rubén. "Gallito es el Rubén Darío del toreo", escribí yo en El libro de Gallito, y ya puede agradecerme el reclamo la Biblioteca Renacimiento, su propietaria. 

De la calidad de la faena sólo da idea la actitud del público que, emocionado y silencioso vio a Gallito marchar, paso a paso, hacia el toro con la muleta plegada en la izquierda, y alegrándole "a cada andada", y luego gritaba, rugía de entusiasmo a cada pase, a cada movimiento del artista, que, reposado y sereno, dominador del público y de la fiera, era el única que permanecía libre de la emoción general, metido sólo en su obra, recreándose en ella, asombrándonos cada vez más, con nuevas irradiaciones de su arte, de su inspiración soberana.

Los toreros que estaban en la plaza permanecían inmóviles de asombro. Los del callejón aplaudían y gritaban, y el público, ebrio de júbilo, de entusiasmo, de admiración, aclamaba a Gallito como el más grande, el más genial, el más asombroso artista del toreo.

Se acabó la corrida; se lo llevaron en hombros, y el público entero permaneció en pie en los tendidos, en las gradas y los palcos, aplaudiendo y vitoreando a Gallito; aplausos y vítores que se repitieron en la calle hasta la fonda. 

Luego, aquí tuvo Gallito una segunda apoteosis, que él agradeció profundamente.

Los que más encarnizadamente le han discutido y negado dan muestra de una nobleza digna del mayor aplauso, acudiendo a felicitarle. Gallito y los "gallistas" agradecemos mucho estas manifestaciones, que prueban que por encima de todas las luchas y apasionamientos está la nobleza de los corazones bien nacidos.

Gracias, muchas gracias.

Cuando más gente había en el cuarto de Gallito, apareció un señor modesto, a quien nadie, fuera del que suscribe, conocía -es una de las más gloriosas ilustraciones del Cuerpo de Ingenieros de Caminos-, y se acercó a Rafael!

- Yo soy un aficionado antiguo -le dijo- que vengo a darle a usted las gracias por esta faena prodigiosa que acaba de ejecutar y a traerle esta caja de habanos. Hágase cuenta de que se los he echado al redondel.

Gallito nos convidó anoche a cenar a los partidarios más antiguos, los que en los días de éxito como en los de fracaso hemos conservado la fe en él. No llegábamos a la docena... Ahora, los que creen en el torero artista se cuentan por millares. Llegó la hora de la verdad.

Con nosotros comieron anoche dos personas, cuya presencia en aquella mesa, a la que yo me sentaba por primera vez, pues nunca había comido con Rafael, tenía una significación que no se ocultará a la perspicacia de los lectores.

Era una de ellas el conocidísimo aficionado y "lagartijista" acérrimo don Joaquín Menchero -¡viva Lagartijo!-, y el otro, nuestro Tomás Borrás, el enemigo de los toros, a quien en una mala tarde ha conquistado el arte del taumaturgo del toreo...

Lector, perdóname. Yo debía haber escrito hoy el artículo definitivo de Gallito...; pero no acierto. Hazte cargo.


domingo, 17 de septiembre de 2023

EXTRACTO DE LA CRÓNICA DE LA SÉPTIMA DEL ABONO MADRILEÑO DE 1883

La séptima del abono capitalino en la temporada de 1883 se verificó el 13 de mayo bajo la presidencia de don Pedro Osorio. Esa tarde se lidiaron a partir de las cuatro y media seis astados de don Ángel González Nandín para los espadas El Gordito, Currito y Gallito. La crónica, sin firma, pero por los indicios podría ser de Leopoldo Vázquez y Rodríguez, apareció en 'El Tío Jindama'. Los extractos más destacados dicen así:

'Cabrillo' se llamaba el tercero de la tarde, que pertenecía a la ganadería de González Nandín y era negro, lucero, bragao y apretao de armas.

Pinto metió el palo en dos ocasiones sin novedad. Bartolesi puso dos varas, sufrió una colada y se vino sobre el firmamento una vez. 

Almendro, de azul con plata, deja sesgando un par bajo.

Morenito, con traje idéntico al de su compañero, se pasa una vez y deja un par aceptable.

Almendro, después de verse apurado y casi cogido dos veces, clava un par. A la salida, el Curro, con inteligencia, grita a la presidencia por cambiar de suerte.

El Gallo, de azul con oro, se fue a 'Cabritillo', que estaba hecho un ladrón, y empleando cinco naturales y uno con la derecha, se tiró con un pinchazo, saliendo desarmado.

Cuatro naturales, uno con la derecha y un pinchazo sin soltar, saliendo desarmado.

Dos naturales y uno con tendencia.

Seguía la grita a la presidencia.

Las palabras que oímos a coro nos parecieron poco propicias para un público civilizado.

Dos naturales, tres con la derecha y un pinchazo. El toro se echa. (...)

'Romero', así se llamaba el último toro, a quien dio libertad en la tarde de hoy el veterano don Carlos, de Albarrán.

Las señas personales, del bicho se entiende, eran: Pelo berrendo en colorado, capirote y botinero. Cuerna bien puesta.

La quimera del toro en el primer tercio de lidia fue la que va a continuación:

Varas que sufrió, ocho.

Caídas que proporcionó a los jinetes, dos.

Caballos que dejó en estado de que se los llevasen las mulillas, uno.

Picadores con quien se avistó: Salguero, Fuentes y Canales.

Espadas que estuvieron a los quites, todos.

Cambiada la suerte, salieron a engalanar al de González Nandín Morena y Almendro.

El primero puso dos pares.

El segundo dejó un par.

Y llegó el finis coronat opus, los postres como si dijéramos. Gallito estaba encargado del toricidio.

Su faena consiste en quince pases y dos pinchazos en su sitio y uno sin soltar, bajo.

Y en cuanto el toro se acostó para in eternum, nosotros tomamos el camino de casita. (...)

Respecto a los toros despachados por el señor Fernando:

El tercero, defendiéndose y hecho un bribón en varas, conservó los pies y buscaba el bulto en palos, y pasó hecho un ladrón a la muerte. (...)

El sexto cumplió. (...)

Resumen

El Gallo se las entendió con un bribón en la muerte de su primero. Hiriendo, nada pudo hacer.

En su segundo pasó muy regularmente, aunque en demasía; pinchando, desgraciado. 

 

miércoles, 13 de septiembre de 2023

RAFAEL CRUZA EL CHARCO CON SU CUÑADO


 'Diario de Córdoba' insertó un breve en su edición del 15 de septiembre de 1907 en el que se daba cuenta del viaje de un grupo de diestros a México:

"A fines del mes actual embarcarán para Méjico (sic) los espadas Gallito y Vicente Segura y el notable banderillero Blanquito". 

Blanquito es, sin duda, Manuel Blanco, extraordinario subalterno que fue primero a las órdenes de su suegro y después a las de su cuñado Rafael hasta que se retiró. Estuvo casado con Eloísa Gómez Campos, hija natural del patriarca de la familia.

domingo, 10 de septiembre de 2023

RAFAEL, HÉROE EN CÁDIZ

Antonio Fuentes
 El 15 de julio de 1907 el rotativo 'La Correspondencia de España' daba a conocer, en un breve, el resultado de la corrida celebrada la víspera en Cádiz:

"Cádiz, 14.-  Para asistir corrida vinieron miles de forasteros en el tren de Sevilla.

Al ser desencajonado se inutilizó uno de toros de Cámara.

Fuentes, bien en el primero y tercero.

En e1 quinto, muy mal y desconfiado.

EI héroe de la tarde fue Gallito.

Dio el quiebro de rodillas.

Con muleta, valientes y adornándose".

miércoles, 6 de septiembre de 2023

RESEÑA ESCUETA DE UNA ACTUACIÓN DEL SEÑOR FERNANDO

'La Correspondencia de España' daba cuenta el domingo 31 de julio de 1887 del espectáculo taurino celebrado en Lisboa el jueves anterior, día 28, en el que tomó parte en el coso de la capital portuguesa el señor Fernando el Gallo. El escueto texto dice así:

Noticias taurinas: Según telegrama que hemos recibido de Lisboa, en la corrida celebrada en aquella plaza el jueves, alcanzaron una justa ovación  el espada Gallito y Saleri.

domingo, 3 de septiembre de 2023

GALLITO CHICO, BIEN EN CARABANCHEL

El periódico 'El Globo' de 8 de mayo de 1899 daba cumplida cuenta de la novillada celebrada en el entonces pueblo de Carabanchel y en la que tomaron parte Algabeño y Gallito:

Toros en Carabanchel

Gallito chico.
La corrida celebrada en dicho pueblo, y en la que despacharon cuatro toros de Comillas, que resultaron superiorísimos, los jóvenes sevillanos Algabeño chico y Gallito, ha superado a cuanto se esperaba de los valientes matadores.

Algabeño mató a su primero de una magnífica estocada hasta el pomo, entrando a toda ley y saliendo por los costillares. A su segundo le dio dos estocadas, no pudiéndose determinar cual de las dos era mejor.

Gallito mató a su primero de una media estocada después de varios pases de pecho, en redondo y de cabeza a rabo, que nada tienen que envidiar a los clásicos del maestro Guerrita. A su segundo toro le propinó después de un cambio, tres pases en redondo, dos con la izquierda y uno de pecho, una media estocada de las del maestro Rafael I, que hizo innecesaria la puntilla.

Ambos matadores banderillearon al tercer toro a los acordes de la música, poniéndole cuatro pares inmejorables.

De los peones, el Sagasta; cumpliendo los demás.

Los picadores, medianos.