Paco Media-Luna es el autor del 'Anuario de El Toreo' en el que da cumplida cuenta de cuantos festejos se celebraron en la plaza de Madrid durante la temporada de 1.885. La inauguración tuvo lugar la tarde del 5 de abril y tomó parte, con no demasiada fortuna, el señor Fernando El Gallo. En tal ocasión se lidiaron toros de Antonio Hernández, vecino de Madrid, y completaron el cartel Lagartijo y Frascuelo.
Así relata Paco la labor de nuestro protagonista:
"Tocaron otra vez los timbales, y apareció el tercer toro, que era colorado, ojinegro, veleto, caído del derecho y bastante bien surtido de pitones. Parecían dos postes telegráficos por el tamaño; es decir, por la extensión. Este animalito fué más voluntario que los anteriores, y por esta causa hubo más juego en la plaza y en la caballeriza.
Fuentes puso cinco varas y sufrió una caída al perder la acémila. José Calderón pinchó una vez y cayó, quedándose sin penco. Cirilo se acercó tres veces al morrillo del bicho y no cayó, pero perdió el jaco. Por último, Bartolesi puso dos puyazos á cambio de una caída. Este Bartolesi fué saludado por el público con el cariño de la anterior temporada y con los mismos mugidos. Cirilo se apeó una vez y dejó el caballo frente al toro. Este acometió, y el jaco se libró del ataque, porque se cuarteó con habilidad.
—Los animales nos dan liciones á los hombres,— decía un picador retirado.
El Gallito perdió el capote una vez. Tocaron á palos, y se encargaron de ponerlos el Gallo mayor y Guerrita. El primero puso un par al cuarteo, trasero. El toro le tocó con el cuerno y lo echó á rodar, pero sin mayor contratiempo, á Dios gracias. Después de esta suerte, puso un par, cuarteando, delantero. Guerrita clavó un par al cuarteo, caído, y otro a la atmósfera. El toro muy bueno para los chicos.
El Gallo vestía traje café con adornos de oro, y previo el brindis se colocó en corto, y dio bailando atrozmente dos pases con la derecha, tres altos y tres cambiados. Luego, arrancándose de largo, dio un pinchazo. Después de un pase natural y uno alto, dio una estocada un poco caída que acabó con el bicho. Carcelero era el nombre del toro. (...)
E1 último se llamaba Espejito, y era negro mulato, meano, corniaUo y astillado del izquierdo. Salió con muchas patas y del primer encontrón á poco si derriba la puerta de Madrid. Antes de empezar la suerte de varas hubo mucho lío. Lagartijo, como autoridad del redondel, estuvo bastante mal. Por fin empezaron á funcionar los piqueros, viéndose que Espejito era tardo pero de cabeza.
Cirilo puso dos varas y sufrió dos caldas, perdiendo un caballo. Fuentes pinchó dos veces y se ganó un golpe con pérdida de caballo. Pepe picó una vez y perdió el jaco. Por último, Bartolesi clavó una vara y cayó á tierra.
Tocaron á poner palos, y Guerrita dejó medio par de frente y uno al cuarteo, delantero, haciendo tres salidas falsas. Almendro salió dos veces en falso y clavó medio par bajo. El toro se tapaba.
El Gallito tuvo que habérselas con un toro que quería coger, y empleó una faena de lo peorcito que se conoce en el género. Vean ustedes: Un pase natural, cuatro altos y un pinchazo á la carrera sin soltar, tomando el callejón de cabeza. Uu sablazo atravesado. El toro se echó de miedo y lo mató el puntillero.
Bien empieza la semana, como decía el otro, y le ahorcaron en lunes. (...)
APRECIACIÓN
Gallito se inauguró en esta temporada con el baile mismo que terminó la anterior. Los primeros pases hubieran sido buenos si hubiera parado más, que es la única manera posible de trastear. El primer pinchazo, muy malo por arrancarse desde largo y cuartear al herir; la estocada fué mejor, aunque también se tiró desde largo. Es preciso arrimarse para matar los toros. Tampoco vimos liar al espada en este toro, sino arrancarse con el trapo suelto. ¡Cuántas invenciones hay que apuntar en estos tiempos de toros malos!
En su segundo toro no pudo estar peor este espada. Ni intentó pasar en regla, ni hizo nada que demostrara sabia la clase de animal que tenia delante. Veremos si en la tarde de hoy cumple mejor este diestro."