domingo, 31 de diciembre de 2023

OTRA FOTO DEL SEÑOR FERNANDO

(Foto: native.jpg (3272×2432) (bnf.fr))

Para despedir el año adjunto la siguiente instantánea de una corrida celebrada el 14 de octubre de 1894 en Nîmes. Según el pie de foto: "Fernando Gómez El Gallo arrodillado ante el primer toro de la corrida Scapulario de la ganadería de D. Pablo Benjumea, al que le acaba de dar la estocada".

El autor de la imagen es M. Crespon.

miércoles, 27 de diciembre de 2023

RETRATO DEL SEÑOR FERNANDO

El gran fotógrafo barcelonés Antoni Esplugas inmortalizó al señor Fernando en la foto que se adjunta. En la descripción que figura en "calaix.gencat.cat" reza lo siguiente: "Retrato de tres cuartos del cuerpo del torero Fernando Gómez García "Gallo" sentado en una silla de cara al respaldo".

Otros datos de interés es que el negativo de vidrio es de gelatina de plata y las medidas que tiene son de 14 x 10 cms.

domingo, 24 de diciembre de 2023

EL SEÑOR FERNANDO PORTADA DE UNA PARTITURA


Lorenzo Suárez es el autor del pasacalle torero para piano "¡Viva Jaén!" "interpretado en todas las plazas de toros de España para la salida o paseo de la Cuadrilla", según reza en la portada. 

La obra data de 1888 y fue editada por Andrés Vidal y Roger en Barcelona. La copia que consta en la BNE tiene en la portada una foto pegada del señor Fernando Gómez "El Gallo", a quien fue dedicada. 

miércoles, 20 de diciembre de 2023

EL SEÑOR FERNANDO TOREA EN MURCIA

Reverte.

Corría el 19 de junio de 1892 cuando en Murcia se celebró una corrida en la que el señor Fernando Gómez 'El Gallo' compartió escenario con Antonio Reverte en la lidia de seis toros de Pérez de la Concha.

Al día siguiente el diario 'La Paz' publicó la siguiente crónica firmada por José María Salvat:

"Nuestra Plaza de Toros estaba ayer tarde ocupada por un inmenso gentío (aunque no tanto como hubiese deseado la empresa), el que esperaba impaciente admirar el distinguido toreo del novel y valiente matador Antonio Reverte, que por primera vez toreaba en esta población; acompañaba al diestro Fernando Gómez, Gallo, para dar fin a 6 berrendos de D. Joaquín Pérez de la Concha que lucían divisa celeste y rosa.

Ocupó la presidencia el Sr. Pérez Trigueros y pisaron la arena las cuadrillas capitaneadas por el Gallo y Reverte que lucían, el primero uniforme verde manzana y oro, y el segundo grana y oro; puestos en sus sitios se dio suelta a Galguito, negro, tomó 6 varas a cambio de 4 caídas y dejó dos guitarras difuntis; entre el Nene y Blanquito le cuelgan 3 pares, y Gallo brinda y se va a dar muerte a su contrario, empleando la siguiente faena: 2 pases intercalados con un pinchazo, una estocada ladeada, otro pinchazo y media estocada de la que se acostó, descabellándole al primer intento. (Palmas).

El segundo se llamaba Rayadito y era negro como su antecesor: tomó una vara después de 8 marronazos, la presidencia ordenó fuese fogueado, encargándose de hacerlo Roda y Rubio, que le propinaron 3 pares y medio; Reverte brinda y saluda a Rayadito con 5 pases y un pinchazo en hueso, 6 pases más y una estocada contraria de la que se acostó; el puntillero a la primera. (Palmas, habanos y sombreros).

Se presenta Palomo que era jabonero y tomó 10 varas a costa de 6 caídas y un potro. Perdigón y el Nene le clavan 3 pares que les valen palmas; Gallo se va al toro con algún recelo y le da 12 pases y una estocada hasta la guarnición, intentando descabellas y acertando a la tercera. (Palmas).

Su sucesor, Sillón, también jabonero, tomó 6 varas y dio dos caídas dejando en tierra un potro. Lagares coloca un par al quiebro y Ostioncito otro al relance, repitiendo el primero con otro a la media vuelta. Reverte da 9 magníficos pases de pitón al rabo y una estocada buena de la que sale mal y es alcanzado, teniéndose que retirar a la enfermería con una lesión en la cabeza; Gallo le da 6 pases y dos pinchazos malos de los que se acuesta, el puntillero a la segunda. (Palmas y pitos).

Finito, negro, al que saluda el Gallo con el quiebro de rodillas escuchando palmas, tomó 4 buenas varas del Inglés y dos del reserva a costa de 4 caídas. Perdigón y el Nene le colocan dos pares y medio regularcitos. La faena del Gallo es la siguiente: 5 pases, embrocado, tres pases, una estocada baja, 7 pases más, una estocada tendida de la que se rindió, el puntillero a la tercera. (Pitos).

Bragadillo, cárdeno, tomó seis varas del Inglés por las que escuchó palmas. Aparece Reverte con una venda en la cabeza y muchas palmas y música. Roda coloca dos pares al quiebro y Rubio uno de frente. Reverte le propina 13 pases naturales siendo revolcado sin consecuencias, tres en redondo y una estocada hasta la bola (Palmas, habanos y la oreja).

Resumen: El ganado resultó malo a excepción del primero y tercero.

El Gallo, bien en quites y desgraciado en la suerte suprema.

Reverte, muy superior en todo.

Los peones, trabajadores.

De los piqueros, el Inglés.

La presidencia, acertada.

La entrada, bastante regular.

domingo, 17 de diciembre de 2023

SEGUNDA ACTUACIÓN DE RAFAEL EN SEVILLA


Crónica de 'El Noticiero Sevillano', firmada por El Nene, de la novillada celebrada en Sevilla el 13 de julio de 1899 con la participación de los Niños Sevillanos: Manuel Molina 'Algabeño chico' y Rafael Gómez 'Gallito chico' con reses de José Clemente, de Trigueros (Huelva):

"A las cinco y cuarto, hora anunciada en los carteles, ocupaban el balcón presidencial los señores Mensaque, Castañer y Amores.

Hecho el paseo y el cambio de la seda por el percal, se dio suelta al

Primero

Antes de la salida del toro, los espectadores del sol invaden los tendidos bajos de sombra.

Uno, al saltar la barrera cae al suelo, siendo conducido a la enfermería en brazos de los municipales. 

Berrendo en colorado, capirote, es el novillo.

Algabeño le da tres lances de capa y Gallito una verónica. 

Con cinco varas, midiendo el suelo los picadores en cuatro ocasiones, se pasa al segundo tercio. Los matadores se lucen en quites. 

Uno de los peones al dar el quiebro es cogido y volteado aparatosamente, saliendo ileso.

Su compañero cuelga un buen par; repiten ambos con dos pares buenos.

Algabeño, de verde y oro, después de brindar se dirige al berrendo al que pasa muy bien de muleta, dando una estocada atravesada.

Dos pases más y un pinchazo.

Dando tablas, vuelve a pinchar. El toro derrota. Un pinchazo hondo, saliendo achuchado. Más trasteos y media estocada. Otro pinchazo. Descabella al primer intento. (Palmas).

Segundo

Colorado, ojo de perdiz. Gallito da varias verónicas que se aplauden.

Con cuatro picotazos sin detrimento para la gente montada, haciéndose buenos quites por los espadas, se pasa a banderillas.

De las cortas da Chicuelo un quiebro sin clavar, después cuelga medio par saliendo volteado. Sagasta coloca un par al cuarteo. Repiten ambos con dos pares, el primero en dos tiempos.

Gallito, de morado y oro, se dirige al de Clemente, que por dos veces intenta saltar al callejón.

Gallo pasa bien de muleta, entre los aplausos del público, y deja media estocada caída y atravesada, de la que dobla la res. (Muchas palmas).

Tercero

Retinto en colorado.

Algabeño le da algunos lances de capa.

Cinco varas por una caída y una baja en las cuadras componen el primer tercio.

Los banderilleros cuelgan cuatro pares buenos.

Algabeño chico da tres pases sufriendo una colada, y cobra una estocada. Más pases y un intento de descabello. Acierta al segundo golpe. (Palmas).

Cuarto

Colorado, lucero y bragao.

Gallo da el quiebro de rodillas que le resulta sucio. Después da dos verónicas y un recorte. Algabeño da otro.

Los picadores clavan en cinco ocasiones la garrocha, sufriendo dos caídas. En una de ellas el de aúpa queda sentado en el lomo de la res.

Tres pares bastan para que el bicho pase a manos del Gallo.

Este manda retirar a la gente, da solo dos pases y citando a recibir clava media estocada tendida.

Después juguetea con la res y sacándole el estoque descabella a pulso. (Ovación).

Quinto

Colorao con bragas.

Continúa la ovación al Gallo.

Los espadas torean al alimón, terminando hincados de rodillas y echando arena al hocico del becerro. (Ovación).

Entre marronazos y puyas aguanta el torete cinco sin percances desagradables para los de aúpa.

Gallito coge los palos y deja un magnífico par cambiando los terrenos, después cuelga otro par. (Muchas palmas).

Uno de los peones termina con medio.

Algabeño chico en el primer pase es cogido aparatosamente. 

Más pases para un pinchazo sin soltar, dos pases más y otro hondo, más trasteos y una pasada sin herir. Un estoconazo, otra atravesada. Por fin descabella al segundo golpe. (Palmas).

Sexto

El último era de pelo berrendo en negro, capirote y botinero. 

Cinco varas por dos caballos muertos, compusieron la primera parte.

Los peones adornan el morrillo de la res con tres pares y medio.

Gallito pasa de muleta con inteligencia y consintiendo al bicho que está huido, entra a matar señalando una estocada atravesada y tendida. Dando tablas cobra una buena. (Palmas).

Comentarios

Y llegó el jueves y el público llenó por completo la plaza y todos los espectadores salieron satisfechos, celebrando a voz en grito las faenas del torero en miniatura que ha sabido conquistarse en dos tardes las simpatías de todos los buenos aficionados.

Al anunciar la corrida se creyó al algunos que la empresa estaba loca y que se hallaba mal avenida con sus intereses; y los que vimos torear al muchacho la otra tarde creímos siempre que era un gran negocio darle cuantas corridas quisiera torear aun cuando se celebraran en días laborables.

¡Es mucho el ruido que se trae el Gallito!

Entremos en detalles. Los becerros de don José Clemente tenían el tamaño apropiado para los toreros que los había n de lidiar; pero estaban mal mantenidos y carecían de bravura hasta el extremo que casi todos se refugiaron en las tabla para morir. 

No habiendo enemigos, inútil será decir que los picadores han estado más valientes que leones, saliéndose a los medios para salvar a los becerros de la chamusca.

Los banderilleros con muchísima voluntad y pareando con presteza. Resultará su trabajo mejor cuando tengan más calma y no se precicipten tanto.

Algabeño chico es valiente y sabe mover el capote y la muleta. Entra a matar con guapeza y tiene bastante afición; sin embargo adolece del gravísimo defecto de embarullarse, y por esta causa hace menos de lo que debiera, prolongando las faenas.

Este matador, lo mismo que los banderilleros, deben refrenar los ardores de la sangre para dar realce al trabajo y adelantar.

Gallito. Las sobresalientes faenas ejecutadas por este joven lidiador en la tarde de hoy y la circunstancia especial de haber sido él mismo el que sacó de sus casillas a todos los aficionados obligándoles a echar un paréntesis en la tarde de hoy en sus cuotidianas ocupaciones, me fuerzan a ser más prolijo al comentar su trabajo, satisfaciendo así los deseos de los aficionados que solo desean oír hablar del Gallito.

¿Ha defraudado este lidiador las esperanzas concebidas la otra tarde? ¿Decayó en algo su cartel? Con la rotunda negativa hay que contestar ambas preguntas.

Si se analiza con detención el trabajo ejecutado en la tarde de hoy por nuestro simpático paisano, preciso es reconocer que ha bullido menos que la otra tarde, pero que su trabajo ha sido hoy, si cabe, más completo porque no contaba con las reses, porque no se daba hoy en los novillos el elemento más indispensable, la bravura, para que luzca el trabajo del lidiador.

Rafael ha estoqueado hoy tres cornúpetos mansos y ha banderilleado perfectamente a un novillo mansurrón, quedado y que adelantaba las manos más que un gazapo.

En todos los momentos de la lidia se le ha visto reposado, inteligente, sereno, adornándose y con mucho arte. Sus faenas no son para juzgarlas por el resultado, no son para telegrafiarlas ni para reseñarlas, porque el resultado no dice, ni al consignarlo puede expresarlo lo que se vio, las mil perfecciones que el inteligente descubre mientras el muchacho trabaja, mientras tiene los trastos en la mano.

Rafael Gómez se coloca para torear en el terreno debido, retrocede cuando ve hay precisión de ello y avanza hasta la misma cuna cuando se penetra que lo hace libre de cacho; y como en esto precisamente consiste la inteligencia y la vista torera hay que reconocer que el muchacho posee estas dos cualidades en algo grado.

También ha demostrado esta tarde que sabe enmendarse y tapar los extraños, consintiendo a los cornúpetos mansurrones y atraerlos a la muleta y al capote hasta apoderarse de ellos como si los magnetizara. El segundo novillo que estoqueó esta tarde, hizo con él cuanto le vino en gana, sujetándolo con el trapo lo mismo que si lo tuviera amarrado.

Capeando estuvo bien, en quites y brega muy acertado y en banderillas clavó al quinto un soberbio par cambiando los terrenos desde alguna distancia, pero con mucho adorno. De segunda intención metió otro buen par llegando bien y saliendo apoyado en los palos a consecuencia de haberse metido demasiado para tener toro.

Por último, y para concluir: el Gallito pisa la plaza con mucha tranquilidad; está en la arena con el mismo sosiego que pasea por la calle de las Sierpes, y sabe sacar partido de todo. Así como se dice de los cómicos que dominan la escena que tienen muchas tablas, hay que decir de éste que tiene mucha arena.

A juzgar por el entusiasmo que tan justamente ha despertado el Gallito, es de presumir que el domingo se vea también llena la plaza, porque a este aliciente se agrega también el de que los toros que se juegan pertenecen a la celebérrima vacada de don Eduardo Miura.

La presidencia ha apurado mucho en la suerte de varas.

Los servicios buenos y la entrada un lleno con su correspondiente invasión de los espectadores solares.

miércoles, 13 de diciembre de 2023

TRIUNFO DE RAFAEL EN MÁLAGA

 

Crónica aparecida en 'El Noticiero Sevillano', de la novillada celebrada en Málaga el 2 de julio de 1899 en la que Rafael Gómez 'Gallito' lidió astados de Peñalver en compañía de Pulguita:

"De los novillos de Peñalver jugados esta tarde, tres fueron buenos y dos medianos. Al sexto lo fogueraron. 

Mataron siete caballos, tomando 29 puyazos.

El primero lo tomó de capa, a la salida, Gallito, dándose tres verónicas superiores, parado, reuniendo y jugando muy bien los brazos.

En los quites, hízoles ceñido y adornándose, rascando el testuz al de Peñalver.

Banderillearon admirablemente Sagasta y Ochoa, cuadrando en la cabeza, dejando tres pares en lo alto.

Pulguita, después de varios pases en corto, cogió una estocada buena, que le valió justa ovación y la oreja.

En el segundo lúcese Gallito tomándole de capa, haciéndolo tres veces parando, cuatro de frente y por detrás y otro buenísimo limpiando la boca al toro.

Banderillearon notablemente Pepito y Chicuelo, siendo aplaudidísimos.

Gallito muleteó ceñido, dando varios pases de pecho, otro con la izquierda y uno de molinete, entrando en corto y cogiendo un soberbio volapié en las mismas péndolas y hasta la bola, que hizo innecesaria la puntilla.

Sale el tercero y lo lancea Pulguita, haciéndolo bien. (Palmas)

Gallito hace un buen quite, rematando, poniendo la montera en el testuz.

Con tres pares buenos adórnanlo Zocato y Ortega.

Pulguita brindó al conocido aficionado señor García del Cid, para seis pases con la izquierda, uno con la derecha y tres nuevamente con la izquierda, de castigo, cogiendo una estocada hasta la mano, entrando bien.

La faena vale al espada una merecida ovación y un regalo del señor García del Cid.

Sale e cuarto, que fue gacho y con muchos pies.

Gallito le da el quiebro de rodillas superiorísimamente dos veces, sufriendo en el último algunos varetazos en la cintura que le hicieron rodar. (Gran ovación).

Parearon muy bien Sagasta y Zocato. Este último resultó cogido a la salida, siendo volteado aparatosamente. Retirado a la enfermería se le apreció un puntazo en el cuello de dos centímetros de extensión y un varetazo en la región glútea.

Gallito toma la muleta y pasa a la res, que está quedada, y la despacha de media estocada, un pinchazo, una buena y un descabello. (Grandes aplausos).

El quinto fue de poder y respeto, Gallito le da tres verónicas clásicas, tres de frente por detrás y un recorte, siendo aplaudido.

En quites lúcese, lo mismo que Pulguita.

Banderillean los matadores, y hácelo Gallito adornándose estilo Guerra, dejando un buen par, cuadrando en la cabeza.

Sigue Pulguita con uno bueno.

Este brinda a la gente del sol, y pasando nueve veces (el toro está quedado y tapándose), coge un pinchazo sin soltar, media estocada buena y contraria y un descabello.

El sexto se declara manso desde el primer momento, Gallito lo recorta, capote al brazo, primorosamente, siendo aplaudido.

Después de tomar una vara es condenado a fuego, quemándolo tres veces Chicuelo y Ochoa, haciéndolo bien.

Gallito chico al primer pase, de pecho, bueno y ceñidísimo, sale achuchado y con la taleguilla izquierda rota.

Sigue con diez pases de cerca y consintiendo al buey, para media estocada recibiendo, dando en hueso.

Repite con otros dos pases y vuelve a  meter el estoque recibiendo. Descabella.

Por coronación obtiene una ovación ruidosa, siendo sacado en hombros.

La afición se muestra sorprendida del asombroso toreo del hijo de Fernando Gómez, recordando la escuela de este inolvidable torero.

El público desea ver a aquel nuevamente.

Pulguita satisfizo a los aficionados. 

La entrada, buena". 


domingo, 10 de diciembre de 2023

RAYITO EN TALAVERA CON JOSELITO EN LA MEMORIA DE UN MALASOMBRA

El matador de toros Manuel del Pozo 'Rayito', cuyos mayores éxitos los cosechó en su faceta de apoderado, le contó a Barico en 'El Ruedo' del 16 de enero de 1947 su negativa a torear en Talavera y lo que le aconteció con un malasombra:

"Poco después, el 22 de septiembre de 1927, Rayito tuvo el mayor fracaso de su vida torera. Le habían propuesto que torease en Talavera de la Reina, y se había negado. El 24 actuó con éxito en Salamanca. Poco después de terminada la corrida, su apoderado le habló por teléfono desde Madrid. Uno de los matadores contratados para Talavera se hallaba lesionado y no podía actuar. El empresario insistía en que fuera Rayito. Se negó de nuevo el matador, y su mozo de estoques habló con el apoderado. Al ir a cenar Rayito, encontró sobre la mesa un papel, en el que se leía: “La cuadrilla te pide que vayas a Talavera.” No supo negarse. El mozo de espadas avisó al apoderado, y a las pocas horas Rayito y su cuadrilla se pusieron en viaje. En Talavera hay un hotel en una calle muy estrecha. Allí fue Rayito. El dueño del hotel le atendió muy amablemente y charló con él largo rato. Descansó unas horas el torero. Cuando empezaba a vestirse para ir a la plaza, entró en la habitación el dueño del hotel: “Yo no soy muy aficionado a los t oros, pero me ha sido usted simpático, y voy a verle torear -dijo-. Cuando vino Gallito -siguió- estuve charlando con él antes de la corrida; me fue simpático, fui a verle, y le mató un toro de la viuda de Ortega, de la misma ganadería que son los de hoy. Luego fui a Madrid; me presentaron a Granero, me fue simpático, fui a verle torear, y le mató un toro”. No siguió el fondista, porque el mozo de estoques de Rayito le sacó de la habitación a empujones. Luego… El primer toro de Rayito murió después de incontables pinchazos. El segundo tuvo más suerte, pues después de dar Rayito tres muletazos por bajo, quedó el toro humillado, y el matador lo descabelló al primer intento, sin haber entrado a matar. El escándalo fue mayúsculo. Rayito, en vez de ir a la barrera, fue a la puerta de salida. Llevaba la ropa en desorden, iba despeinado y sudoroso y conservaba en las manos estoque y muleta. Los talaveranos creyeron, afortunadamente, que se había vuelto loco".


miércoles, 6 de diciembre de 2023

LEANDRO NAVARRO PARTIDARIO DE RAFAEL ORTEGA

Leandro Navarro.
Rafael Martínez Gandía entrevistó, en la sección de 'El Ruedo' 'Aficionados de categoría  y con solera", al comediógrafo Leandro Navarro, quien en sus respuestas nombró entre sus predilectos a tres miembros de la familia de los Gallo. El artículo se publicó el 9 de mayo de 1945:

Rafael Ortega Gómez 'Gallito': "Yo creo que una de las mejores figuras que tenemos es Gallito. Para mí, este muchacho tiene una enorme voluntad, y contra lo que se dice por ahí, creo que no tiene más miedo que el que puedan tener los demás. Yo le he visto hacer una faena monstruosa y salir prendido. Lo que pasa es que no ha tenido suerte". 

 Joselito: "A él (Belmonte)y a Joselito, el coloso, cuya gracia, facilidad y estilo son inolvidables. Siempre me acordaré de aquella corrida, en Madrid, en que mató seis toros y uno de regalo".

Rafael El Gallo: "También me acuerdo de una despedida de Limeño en una tarde en que El Gallo, Rafael, derrochó el salero hasta lo inconcebible y me dejó un buen sabor que aun me dura". 

domingo, 3 de diciembre de 2023

JOSELITO EN UN MUSEO SEVILLANO

Foto de Arjona que ilustra el artículo de 'El Ruedo'.
Refiere Julio Estefanía en 'El Ruedo' de 5 de noviembre de 1968 la apertura en la sevillanísima calle Adriano de un museo taurino que se llamó 'La Vejez del Torero'. 

Emocionante resulta la vitrina dedicada al fenómeno de Gelves. Allí está casi todo el atuendo que vistió Joselito la tarde de Talavera, La camisa palidecida y dramática, un trozo del capote que usó aquella tarde José, capote que, por cierto, se lo partió el bicho peligroso causante de su muerte. Hay una gran «foto» de Gallito exánime, de mármol frío ya, en la enfermería. Y arriba, presidiéndolo todo, otra «foto» de José sonriente, ajeno al tremendo zarpazo que le aguardaba en la arena de una plaza de Castilla. (...)

Y otra foto en la que Joselito aparece marcándose un 'chotis' castizo".

Rojito, el cicerone que guía al periodista, es pesimista en cuanto a la pervivencia de la exposición porque cuenta con pocos visitantes, "posiblemente, así lo creemos, porque la inclusión de este interesante Museo en los itinerarios hispalenses no alcanzó todavía una propaganda total".